Grupo Cacaolat quiere hacer crecer la categoría de batidos en España y liderarla en todos los canales de cara a 2020, según ha explicado estos días su director general Francesc Lluch. "Creemos que la de batidos es una categoría aún pequeña en volumen en España y por tanto hay recorrido para seguir creciendo y lo hacemos a través de nuevas formulaciones", afirma Lluch. Pero además, la empresa no descarta diversificar hacia productos de alimentación sólida en torno a su "core business', el cacao. "En todos nuestros estudios, los equipos de marketing e I+D detectan que siempre que seamos respetuosos con nuestro ADN (básicamente el mundo del placer y del cacao) Cacaolat podría tener algún día alguna extensión de gama más allá del mundo de los batidos", añade. En este sentido, cabe recordar que cuando la empresa estuvo en manos de Nueva Rumasa ya se hicieron pruebas de producto con bombones, galletas rellenas de chocolate y cacao a la taza.
La compañía, participada al 50% por Damm y Cobega, aumentó su facturación un 7% en 2017 hasta alcanzar los 62 M€, con un ebitda de 10 M€ y una producción de 55 Ml. En estos años, la compañía ha logrado reflotar la marca y posicionarla como líder en hostelería y en formato familiar de 1l en alimentación, con una participación total en España en batidos del 20% en valor (60% en el caso de Cataluña), dos puntos porcentuales por debajo del actual líder.
Para hacer crecer la categoría la compañía ha ido innovando con continúos lanzamientos dirigidos hacia un consumidor generalmente más adulto. Así, este 2018 ha presentado su primera bebida vegetal, 'Cacaolat Veggie', en el que se ha sustituido por primera vez en los 85 años de la marca la leche de vaca de su tradicional batido por una bebida con base de avena. Como parte de esta innovación, también lanzó durante 2017, aunque lo está dando a conocer ahora, 'Cacaolat Noir', en colaboración con el reconocido repostero Oriol Balaguer.
Obtiene la certificación halal
Una de las claves del plan de crecimiento de Cacolat es elevar sus ventas internacionales, que en 2017 aportaron el 7% del volumen de negocio, porcentaje que espera elevar hasta el 15% en 2020. El primer mercado internacional para Cacaolat es actulamente Corea del Sur, señala Lluch, que se incorporó en 2017 y absorbe casi el 50% de las ventas internacionales de la marca.
También es relevante Portugal, donde opera a través de una alianza con el grupo Sumol-Compal, además de otros países europeos como Irlanda e Italia y algunos árabes. En este área, la firma acaba de obtener la certificación halal, lo que le supone una oportunidad para abrir negocio en grandes mercados de influencia árabe como Indonesia.