La consultora Mintel ha avanzado algunos de los grandes ejes en los que pivotarán las tendencias en el mercado global de belleza y cuidado personal a lo largo de 2024, tales como la neurocosmética, la inteligencia artificial y la eficacia de los productos. Y es que los consumidores cada vez dan más importancia al valor, impulsando la importancia de la calidad y los ingredientes probados, al tiempo que priorizan el bienestar y aceleran el poder de la conexión mente-cuerpo. A todo esto se suman las nuevas tecnologías como la IA, que está transformando la industria y avanzando hacia soluciones más eficientes, innovadoras y que apuestan por la inclusión.

1. NeuroGlow

Los consumidores están priorizando el bienestar para sentirse mejor tanto a nivel corporal como mental, y por esta vía transitará el mercado de la belleza, en el que el bienestar mental y la apariencia física estarán conectados, de ahí que veremos prácticas como la psicodermatología -disciplina que explora la relación entre el bienestar psicológico y la salud de la piel- y la neurocosmética, que se centra en la conexión mente-piel. El análisis de datos avanzado, las pruebas de ADN y los algoritmos personalizados permitirán a las marcas innovar en productos y rutinas de belleza personalizadas y adaptadas a las necesidades físicas y mentales individuales.

2. Beaut-AI

Según Mintel, la inteligencia artificial impregnará la industria de la belleza en forma de recomendaciones personalizadas, experiencias de prueba virtuales e información basada en datos. Aquí la transparencia y el buen hacer será fundamental para su crecimiento. ¿Cómo será posible? Al analizar datos y aprender patrones se genera conocimiento. Las marcas pueden aprovechar la información, como son los comentarios de los clientes en las redes sociales, para identificar carencias y así crear productos que se adapten a necesidades específicas, lo que impulsará la aparición de experiencias de belleza altamente personalizadas, al tiempo que podrá monitorearse, en tiempo real, el grado de satisfacción del usuario.

3. Simplicidad sofisticada

La industria de la belleza experimentará un cambio de paradigma a medida que los consumidores prioricen la eficacia y la funcionalidad sobre envases originales y campañas de marketing llamativas. Y es que los consumidores buscan transparencia y resultados tangibles para justificar el precio de los productos. Para ello, las investigaciones, los estudios clínicos o las certificaciones que fundamenten lo que se vende como eficaz ayudará a generar confianza y credibilidad. Esto influye en el comportamiento de compra del consumidor, que ha pasado de acumular productos a seleccionar una gama de artículos esenciales, pero de alta calidad. De ahí que veremos cómo las compañías de belleza invertirán en formulaciones avanzadas e ingredientes y tecnologías de vanguardia para soluciones específicas.