Según informa la agencia Reuters, la Comisión Europea se opondría a que los grupos cementeros Cemex y Holcim integraran sus negocios en España. La agencia, que hace referencia a una fuente familiarizada con el proceso, explica que se habría enviado una carta a las empresas con objeciones a esta fusión debido al impacto negativo que tendría para la libre competencia en nuestro país. No obstante, desde Cemex ni se confirma ni se desmiente esta información.
Esta comunicación se habría producido después de que la Comisión Europea pusiera en marcha el pasado 23 de abril una investigación sobre el proyecto de compra del negocio español de la suiza Holcim por parte de la mejicana Cemex al considerar que esta operación podría ocasionar problemas de competencia en el mercado cementero español que supondrían subidas de precios. En un principio, la investigación se habría iniciado porque la operación "podría reducir de manera significativa la competencia en el mercado del cemento gris en algunas zonas de España", y porque la adquisición de Holcim podría facilitar la coordinación entre los competidores que queden en el mercado para repartirse los clientes y elevar los precios, según un comunicado emitido en abril desde Bruselas. De todas formas, las autoridades comunitarias disponen hasta el próximo día 5 de septiembre para decidir si vetan o autorizan (con o sin condiciones) la fusión.
Hay que recordar que Holcim y Cemex llegaron a un acuerdo en Europa el pasado verano para la integración de sus negocios que implicaba el intercambio de diversos activos en centroeuropa, donde la suiza se iba a quedar con las operaciones de Cemex en Alemania occidental, mientras que la mejicana se haría cargo del negocio de Holcim en República Checa con la adquisición de su filial Cesko. Hace algo más de un mes, los reguladores antimonopolio de la UE sí que aprobaron sin condiciones un canje de activos entre ambas empresas en Alemania y en la República Checa. Ya en nuestro país, Cemex pasaría a contar con el 75% de una nueva compañía y Holcim con el 25% restante , que operaría en el mercado español bajo la marca 'Cemex'. En España, ambas compañías integrarían sus respectivos negocios relacionados con los sectores del cemento, hormigón preamasado, agregados y mortero, azotados en los últimos tiempos por la drástica caída de la demanda.
Por último, en abril de este año Holcim y la francesa Lafarge, de su mismo sector, alcanzaron un acuerdo de fusión "entre iguales" , que se cerraría en el primer semestre de 2015. El acuerdo establece una "transacción estructurada como una oferta pública de intercambio iniciado por Holcim con una relación de canje de una acción de Holcim por una acción de Lafarge". La fusión de ambas compañías alumbraría el líder mundial de cemento LafargeHolcim, con unos ingresos de 32.000 M€ y un Ebitda de 6.500 M€ anuales. La operación deberá ser aprobada por las distintas autoridades de defensa de la competencia, aunque el nuevo grupo espera obtener sinergias de unos 1.400 M anuales durante la ejecución de un plan de mejora a tres años. Además, el grupo prevé una "optimización estratégica de la cartera anticipándose a los requisitos reglamentarios a través de desinversiones de entre el 10% y el 15% del Ebitda mundial".
En 2013, Holcim, presente en 70 países, tuvo ingresos de 19.700 M CHF, con una plantilla de 71.000 trabajadores, mientras Lafarge registró ventas de 15.200 M€, con una implantación en 62 países y 64.000 empleados. Por último, la multinacional Cemex tuvo ingresos de 15.227 M$ y pérdidas de 265 M también el ejercicio pasado, con unos 43.000 empleados.
