Las autoridades regulatorias han dado a Unilever el visto bueno a la adquisición de las marcas de jabones 'Camay' y 'Zest', así como a una planta de producción en México, propiedad de Procter & Gamble hasta finales de diciembre de 2014. En esa fecha, ambas multinacionales habían firmado el acuerdo de compra-venta , que esperaban cerrar durante la primavera.
Recordemos que la operación englobada 'Camay', a nivel mundial, y 'Zest', con excepción de América del Norte y el Caribe , mercados en los que la enseña ya había sido vendida, así como la fábrica especializada en la elaboración de barras de jabón . Con su cierre, Procter & Gamble reafirmaba su política de centrarse en sus negocios más rentables, al tiempo que Unilever fortalecía su posicionamiento en el sector de no alimentación.