En un escenario repleto de datos principalmente positivos como el que deja el turismo en 2016, los operadores hoteleros con presencia en nuestro país continúan desarrollado sus catálogos, con especial hincapié en los segmentos de mayor categoría. La planta hotelera vuelve a crecer, aunque tímidamente, con el refuerzo de los grupos internacionales que, a la postre, también facilitarán la llegada de más turistas premium. La influencia de estas compañías y la creciente presencia de inversores en el mercado español asimismo acarrea ligeros cambios en cuanto a las fórmulas de explotación de los catálogos, aún muy patrimonialistas, tal y como recoge el último informe sobre la actividad de los Grupos Hoteleros durante el ejercicio 2016, que acaba de publicar Alimarket Hoteles.
Según los datos del Censo de Hoteles Alimarket, que incluye todos los establecimientos afiliados a alguna cadena y los independientes a partir de 40 habitaciones, el parque hotelero español estaba compuesto a fecha de 1 de enero de 2017 por 6.331 establecimientos, con una oferta alojativa total de 787.805 unidades. Estas cifras, que suponen un ligero incremento del 0,5%, el mismo que el ejercicio pasado, se traducen en un saldo neto de cincuenta establecimientos más, que añaden 4.000 habitaciones a la oferta. Del total del parque, un 69,55% se reparte entre medio millar de compañías hoteleras consideradas como cadenas para la elaboración del presente reportaje, mientras que los establecimientos operados de forma independiente mantienen su tendencia decreciente de los últimos tiempos, hasta el 30,45%. Se trata de un dato relevante, ya que los grupos hoteleros han ido ampliando su participación año tras año desde principios de este siglo, cuando el 50% de la oferta estaba operada de manera independiente.
El ranking con los 250 primeros operadores del sector en España por número de habitaciones lo lideran Meliá, NH y Barceló, seguido de Marriott, Accor y Eurostars. Esta última compañía alcanza este año el sexto puesto del ranking, por delante de Riu, Iberostar, H10 y Best, tras la continua escalada de incorporaciones a su catálogo, y no sólo en régimen de alquiler.
En enero de 2017, el sector muestra una estructura de propiedad muy diferente, según la envergadura y el origen de las cadenas. En el caso de las compañías de menor tamaño, su vinculación al ladrillo es mucho mayor que en el caso de los principales operadores del sector. En concreto, cerca de un 30% del catálogo del top ten del ranking de grupos hoteleros se integra bajo fórmulas poco intensivas en capital, bien management, bien franquicia. Esta cuota se reduce prácticamente a la mitad, hasta el 15,54%, si el análisis se extiende al conjunto de cadenas. Así, hasta un 84,46% de las unidades alojativas de los más de medio millar de grupos contabilizados para el presente reportaje están afiliadas a las compañías bien en propiedad, bien en arrendamiento.