Durante los últimos meses, las grandes empresas han puesto sus ojos en el público infantil y han propuesto una batería de lanzamientos que tenían como objetivo la conquista de los más pequeños. Contrariamente a lo que ha ido ocurriendo progresivamente en todos los sectores alimentarios, el mercado orientado a las edades más tempranas sigue dominado por los productos marquistas en detrimento de la MDD. A la hora de desarrollar estas nuevas líneas, la premisa principal, junto con la lucha por las licencias de los personajes más populares, ha sido el factor salud.
Las grandes marcas han abordado tanto los productos únicamente infantiles, como leche o yogures para bebés, hasta las líneas relacionadas con el ocio o el consumo fuera del hogar. Todos estos lanzamientos han ido acompañados por una serie de campañas paralelas tanto institucionales como promovidas por las empresas privadas y que tenían como finalidad principal evitar la obesidad infantil, problema que durante los últimos años ha experimentado un avance alarmante.
La principal línea de trabajo establecida por el Ministerio de Sanidad es la estrategia Naos que aunaba unas directrices nutricionales con la actividad física y la práctica de deporte. Esta iniciativa, que tiene su origen en 2005, ha ido ampliando su área de actuación, desde líneas generales, a actuaciones epecíficas en centros escolares, acuerdos con las autoridades locales y programas de promoción del deporte a través del organismo público del Consejo Superior. La última iniciativa, enmarcada dentro de la corriente general tanto en Europa como en el resto de los países del primer mundo, es el control de la ingesta diaria de sal. En este sentido, ya son muchos los fabricantes que se han adelantado a las próximas leyes para amoldarse a las futuras restrinciones es una de las principales novedades en las nuevas referencias.
Dentro del tejido industrial, el sector del pescado congelado y preparado, ya maduro a nivel comercial y con limitadas posibilidades de expansión ha tomado como referencia a los niños en el desarrollo de nuevos productos que pudieran atraer a los nuevos consumidores. Tradicionalmente el consumo de pescado en estas edades es muy bajo y siempre representa un caballo de batalla. Pescanova, Isabel, o Delfin, siguiendo a Calvo hace un par de años, son las firmas mas activas en los últimos meses con un nuevo portfolio de novedades.
El líder del producto marquista congelado, presentó en la pasada feria de Conxemar sus ‘Tallarimis’, a suerte de los tradicionales tallirinis de pasta con textura al dente pero elaborados a partir de sucedáneo de cangrejo. Contienen 0% de materia grasa y se pueden preparar tanto en el microondas como en la sartén. A esta novedad, la más detacada, se le ha unido sus nuevas salchichas y hamburguesas, también con 0% de materia grasa, dirigidas a los más pequeños de la casa y elaboradas a base de surimi. En la misma línea se sitúan Isabel y Delfín, una también en el terreno de los congelados y la otra en ambiente. Ambas han buscado fórmulas que recuerdan la carne, como las hamburguesas, las salchichas y las albóndigas, todas a base de atún.