El tramo final de la temporada 2016-2017 de manzana ha estado marcada por un recuperado optimismo para VOG, que se muestra satisfecha con los últimos meses de campaña. Tal como apuntan desde el consorcio italiano, en el ámbito europeo la temporada tuvo un comienzo complicado, "con una producción por tercera vez consecutiva de más de 12 Mt, y con las mismas dificultades de los años anteriores: la exportación de las manzanas polacas afectada por el embargo ruso y la inestabilidad política y financiera de los países norteafricanos". Sin embargo, a principios de primavera, tras varios meses con un buen ritmo de desalmacenaje, "el mercado se revitalizó y las cotizaciones registraron un vigoroso incremento, impulsado en gran parte por las noticias cada vez más detalladas acerca de los relevantes daños sufridos por los agricultores en muchas cuencas de producción, a causa de las heladas primaverales en pleno período de floración", concluye.
En este contexto, destacable es el desarrollo de las variedades club para VOG, que "han demostrado su resiliencia frente a la crisis, con óptimos resultados en las ventas y en la remuneración de los productores. Esto vale asimismo para el sector de las manzanas biológicas, que han cerrado una excelente campaña comercial" y a la que auguran aumento en la demanda. Especialmente relevante, en este segmento premium, ha sido el desarrollo de la manzana Kanzi, con un incremento del 50% en la cosecha, gracias a las nuevas áreas de cultivo implementadas, que ha permitido al consorcio prolongar hasta julio por primera vez la temporada.
En lo que respecto a la cosecha de 2017, las primeras previsiones de VOG pasan por una buena cosecha tanto en cantidad como en calidad. "Después de dos temporadas de vacas flacas, la campaña 2016-2017 se cierra con renovado optimismo", apunta Gerhard Dichgans, director del consorcio.
Las primeras estimaciones relativas a la próxima cosecha europea de 2017 cifran la producción en torno a los 9 Mt, un 25% inferior a la de 2016. Determinadas áreas de primer orden en el cultivo de la manzana sufrirán pérdidas que irán del 50 al 70% con respecto a la cosecha normal. La próxima temporada, que va a ser muy difícil para los productores de las zonas afectadas por las heladas, el mercado y los precios se adecuarán sin duda a la falta de oferta. Tal como destaca Dichgans, "en otoño los precios de las manzanas volverán a niveles rentables, pero hay que evitar a toda costa picos especulativos. En las distintas variedades sí veremos desequilibrios notables en la región de Trentino Alto Adige: esto vale en primer lugar para las Golden Delicious, en claro déficit, mientras que las Royal Gala tendrán una cosecha de niveles normales gracias a que la parte baja del valle pudo protegerse mejor de las heladas con instalaciones antiescarcha".