El hasta hace unos años mayor grupo canario de alimentación, José Sánchez Peñate, podría tener los días contados e ir a liquidación tras la crítica situación financiera en la que se encuentra y al no poder llevar a cabo el plan de viabilidad firmado el pasado mes de enero entre la empresa y los trabajadores. El responsable de llevar a cabo de este plan, el fondo inversor Hiperion, se ha descolgado del mismo para sorpresa de la administración concursal y los empleados. Hiperion ha presentado una contraoferta muy mermada a todos los niveles, en la que no asume la gran parte de las deudas con la masa acreedora y que tan solo incluye inversiones mínimas para retomar la actividad.
