El grupo portugués BA Vidro ha comunicado al Consejo de Administración de La Seda de Barcelona una propuesta de suscribir y desembolsar íntegramente el aumento de capital que la compañía catalana pretende ejecutar para refinanciar su deuda (en torno a unos 40 M€) llevando posteriormente a cabo a cambio una oferta pública de adquisición voluntaria sobre el resto del capital.
Actualmente BA Vidro controla a través de las instrumentales BA PET y BA PET II aproximadamente el 20% del capital de La Seda. Una vez ejecutada la ampliación, se calcula que aproximadamente elevaría su porcentaje de participación hasta el 60%, por lo que realizaría entonces una OPA sobre el 40% restante.
El Consejo de administración de la compañía, en el comunicado remitido a la CNMV, no se ha pronunciado al respecto al considerar que esta oferta no ha sido realizada en firme. Tampoco lo han hecho los bancos que controlan el grueso del pasivo, Caixa Geral, Deutsche Bank, HSBC y La Caixa, y de los que depende el éxito de la operación, ya que se da por descontado que si se ejecuta la ampliación de capital en los términos previstos el valor de la acción puede sufrir una importante corrección a la baja.
En el fondo la propuesta planteada por BA Vidro pretende frenar los planes del fondo de inversión Anchorage, que en fechas recientes se habría hecho con gran parte de la deuda subordinada de La Seda con objeto de poderla capitalizar y tomar el control de la compañía. BA Vidro participa en La Seda desde 2009, después precisamente de otra ampliación de capital. En los últimos años, diversos medios han apuntado a que desde la entrada de la vidriera lusa se ha formado un frente portugués dentro del accionariado de La Seda, junto con Caixa Geral (accionista y a la vez acreedor), que podría repetirse de nuevo.