Los productos papeleros proceden de un recurso natural y renovable y son además reciclables y biodegradables. El ecodiseño es la herramienta que permite desarrollar toda la potencialidad de esas características medioambientales del papel y mejorar su reciclabilidad.
El ecodiseño supone ver el producto con otros ojos, repensar el producto atendiendo a las consideraciones medioambientales, sin olvidar por supuesto la funcionalidad. Abre las puertas a la innovación y a la creatividad y se convierte de este modo en una potente palanca de competitividad.
El papel está protagonizando en diversas aplicaciones en los últimos años un proceso creciente de sustitución de otros materiales que no tienen esas características medioambientales. Es el caso de las bolsas de papel y de los envases de cartón. Y se trata de una tendencia que en los próximos años se producirá también previsiblemente en otros productos papeleros.
La mejora de la sostenibilidad de los productos papeleros a través del ecodiseño es un aspecto cada vez más relevante para avanzar hacia la economía circular, el nuevo modelo industrial en el que los residuos se convierten en recursos, incrementando la eficiencia a lo largo de todo el ciclo.
Precisamente, el proyecto MainStream del Foro Económico Mundial, que incluye tres programas piloto para avanzar en la economía circular, ha elegido para uno de ellos al papel y el cartón. El objetivo de este piloto es consolidar un conjunto de normas de ecodiseño universales y fáciles de usar, que puedan después marcar el camino para otros materiales.
Las recomendaciones para el ecodiseño de productos papeleros en general y para los envases y embalajes en particular pasan por evitar la mezcla de materiales y los excesivos tratamientos o aditivos que puedan dificultar el reciclado, optimizar el transporte, evitar ineficiencias a lo largo de la cadena de valor, facilitar la gestión de los envases en los lineales, etc.
El ecodiseño de los envases resultará un factor clave en los próximos años, aportando ecoeficiencia al envase, desde su diseño y fabricación, en su uso, y hasta el final de su ciclo de vida.
Estas son algunas recomendaciones para el ecodiseño de los envases de papel y cartón:
● Evitar la mezcla de materiales (por ejemplo, evitar el uso de plástico termosellado con los envases/embalajes de cartón ondulado).
● Buscar soluciones monomateriales en papel y cartón (por ejemplo, utilizar en los envases precintos o cintas de rasgado de papel, acondicionadores de cartón, etc.).
● Evitar tratamientos o aditivos en calidad o cantidad que puedan ser perjudiciales para el medioambiente o que dificulten su reciclado (por ejemplo, ceras, grapas, adhesivos, etc.).
● Diseñar el envase secundario y primario al mismo tiempo para evitar ineficiencias en la cadena de valor.
● Diseñar envases de papel y cartón fáciles de gestionar en los lineales (que se doblen y plieguen bien) y seguros para el personal reponedor de estanterías (por ejemplo, que no se necesite cutter).
● Destacar en el envase y embalaje información mediante pictogramas sobre la forma de manipularlo y sobre su reciclabilidad.
● Prevenir el sobreenvasado, siempre optimizando la funcionalidad del envase.
● Optimizar el transporte de cajas al envasador, para lo cual se suministrarán en forma plana, y el transporte del envasador a la cadena de distribución, para lo cual se utilizarán envases modulares.