El crecimiento medio anual en valor del sector de productos para el cuidado corporal previsto para los próximos cinco años muestra síntomas de estancamiento en muchos mercados de Europa occidental. Para reavivar el interés en esta categoría de productos, el sector debería hacer más hincapié en la importancia del cuidado corporal, insistiendo en la idea de que “la piel no termina en el cuello”. Y puesto que la mayoría de los consumidores se sienten más proclives a utilizar productos para el cuidado corporal durante la época estival, habría que darle un enfoque estacional.
Visión placentera y sensorial
Las marcas de productos para el cuidado corporal están sumándose al movimiento emergente de la “belleza sin prisas” (del inglés Slow Beauty), que analiza la forma en que los consumidores buscan desconectar, relajarse y alejarse del ritmo vertiginoso de la vida moderna. En la cultura actual de la gratificación instantánea y los envíos en menos de 24 horas, cada vez son más las marcas de cosméticos que animan a los consumidores a buscar momentos de relajación. Y habida cuenta de que los consumidores se ven cada vez más abrumados por el volumen de información que deben procesar y el flujo inagotable de productos disponibles, muchos han decidido levantar el pie del acelerador y optar por un estilo de vida más pausado y reflexivo. Y en esta búsqueda de la ralentización y del tiempo necesario para cuidarse, la belleza sin prisas ofrece a los consumidores la posibilidad de encontrarse a sí mismos con ayuda de determinados productos. Prestando más atención a los productos que consumimos ponemos el foco en lo que ingerimos y aplicamos sobre nuestro cuerpo. Otro elemento básico del movimiento de la belleza sin prisas es la vuelta al uso de ingredientes tradicionales y funcionales que garanticen la eficacia de los productos. Los productos de spa para utilizar en casa son un ingrediente esencial de la belleza sin prisas. La popularidad de los baños de inmersión y las mascarillas faciales está creciendo entre los amantes de la vida relajada y el cuidado personal.
Las marcas que animan a desestresarse, contribuyen al bienestar, ayudan a conciliar el sueño, incorporan hierbas adaptógenas de moda, y refuerzan la experiencia placentera de aplicarse una loción corporal (por ejemplo, con una acción de masaje relajante) están sabiendo aprovechar el movimiento de la belleza sensorial y sin prisas.
Crear productos para las épocas de esparcimiento
El cuidado corporal suele adquirir protagonismo durante la época estival. El aumento de la exposición de la piel a los agentes externos en los meses de verano suele conllevar la aparición de problemas cutáneos y genera situaciones que reclaman el uso de productos para el cuidado corporal. Los fabricantes de estos productos deberían estudiar las necesidades concretas que surgen en la época estival, como los talones agrietados que provocan las sandalias o el incómodo efecto del sudor en las piernas que sufren algunos viajeros. Actualmente hay pocos productos que atiendan a estas necesidades de cuidado personal. Y existe la posibilidad de aprovechar plenamente el periodo vacacional formulando productos para el cuidado de la piel antes y después del verano, o que provoquen sensaciones refrescantes y prolonguen el bronceado, combinándolos con aftersún. Y en épocas más alejadas del descanso veraniego, las marcas podrían recurrir a fragancias que evoquen sensaciones estivales.
Desarrollo de productos especializados y personalizados
Aunque los productos multifunción siguen siendo populares, el diseño de nuevos productos especializados y personalizados también tiene potencial, siempre que sus ventajas sean claras. En el último año, han aparecido productos de acción localizada (para el busto o las nalgas, por ejemplo), con beneficios específicos (cuidado de tatuajes o recuperación muscular después del ejercicio) o que permiten al usuario personalizar el aroma. Estas innovaciones pueden aportar valor añadido al sector y atraer a quienes buscan experiencias más exclusivas y personalizadas. Lo mismo puede decirse de los productos para el cuidado corporal dirigidos a determinados grupos de consumidores, no vinculados al sexo: de hecho, se lanzan muy pocos nuevos productos destinados a niños y bebés o a los consumidores de más edad.
Aumentar la fidelización hacia los productos para el cuidado de las manos y los pies
Los productos para el cuidado de las manos y los pies son dos pequeños segmentos dentro del sector de artículos para el cuidado corporal. Las principales apuestas en estos segmentos giran en torno a los ingredientes botánicos y la hidratación. Dado que más del 25% de los consumidores europeos de artículos para el cuidado corporal, de las manos y los pies emplean el mismo producto en todo el cuerpo, los fabricantes de productos especializados en el cuidado de las manos y los pies tienen la posibilidad de aplicar una estrategia más focalizada. Pueden aportar valor al segmento para el cuidado de las manos destacando las ventajas de las fórmulas antiedad y para el cuidado de uñas, y desarrollando formatos y tratamientos intensivos (como, por ejemplo, guantes, soluciones de uso nocturno o por etapas). Las marcas de productos para el cuidado de los pies pueden atraer el interés de los consumidores utilizando texturas, colores y diseños atractivos, o recabando la colaboración de líderes de opinión en las redes sociales. Así podrían contrarrestar la competencia de aquellos productos para el cuidado corporal que se consideran versátiles y aptos para el cuidado de las manos y los pies.
Oportunidades en biocosmética, cosmética natural y orgánica
La búsqueda del bienestar está de moda en todo el mundo. Esto ha hecho que, en muchas categorías, los consumidores examinen cuidadosamente los productos que adquieren, lo que ha redundado en un aumento de la oferta de productos exentos de determinados ingredientes durante los últimos años. Porque los consumidores ya no son simples receptores pasivos del marketing de marca. De hecho, utilizan las redes sociales y recurren a las organizaciones de defensa de los usuarios para confirmar que los productos cosméticos no son perjudiciales para la salud. Las marcas pueden reforzar su posicionamiento en el ámbito de la belleza natural obteniendo certificaciones emitidas por las organizaciones de defensa de los consumidores, e incluso presumir del contenido mínimo de ingredientes de sus productos y su procedencia en sus mensajes promocionales.
Los consumidores jóvenes de todo el mundo buscan marcas de fabricantes respetuosos con el medio ambiente y dotados de un plan de sostenibilidad viable. Igual que ocurre con otros productos cosméticos y de cuidado personal, el desarrollo de nuevos productos de cuidado corporal debe tender a reducir la preocupación de los consumidores por la sostenibilidad y la procedencia de los ingredientes, puesto que muchos de ellos esperan que los fabricantes reflejen claramente el origen de los mismos y repongan los recursos naturales utilizados. En un momento de especial preocupación por los residuos plásticos, las marcas que comercializan productos reutilizables o exentos de plástico gozan de mayor atractivo.
El uso de ingredientes botánicos, naturales u orgánicos representa un reclamo comercial importante: mientras seis de cada diez usuarios de artículos para el cuidado corporal en Francia, Alemania, Italia y España creen que los productos que contienen ingredientes botánicos (como aloe vera o manteca de karité) son mejores para la piel que aquellos que no los contienen, más de siete de cada diez buscan productos con ingredientes naturales. Y alrededor de un tercio de ellos escogen productos catalogados como orgánicos (es decir, cuyos ingredientes han sido obtenidos de forma responsable, no modificados genéticamente, etc.).
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