Impulso financiero
Precisamente, dos de las principales operaciones corporativas firmadas en estos últimos meses han formado parte de sendos procesos de refinanciación. Telepizza redujo su deuda desde los 485 M€ hasta los 285 M€, al tiempo que incorporaba a su accionariado al fondo de inversión estadounidense Kohlberg Kravis Roberts – KKR (36%) y otros acreedores (13%), manteniendo el 51% los antiguos socios de la cadena de pizzerías, Permira y la familia Ballvé, mediante la sociedad Telefood. El destino del respaldo financiero y accionarial obtenido es servir para relanzar Telepizza, remodelando su red de tiendas (ya ha puesto en marcha los primeros locales con el nuevo diseño) en España y reforzando su expansión internacional, tanto en Latinoamérica como en Centroeuropa. Mientras, la mexicana Alsea adquirió el 71,76% que el fondo CVC Capital Partners suscribía en el capital de Grupo Zena, en una transacción que valoró el grupo multimarca ('Foster's Hollywood', 'Domino's Pizza', 'Cañas y Tapas', 'La Vaca Argentina', etc) en unos 260 M€, incluyendo una deuda de 115 M, que también fue refinanciada como parte de la operación. El afán de diversificación y expansión geográfica del grupo industrial Alsea se impuso a las propuestas presentadas por otros grupos, ganando una carrera muy similar a la protagonizada en 2011 por el conglomerado polaco AmRest, cuando adquirió el 76,3% de Restauravia (La Tagliatella y Kenchic-KFC) al fondo de inversiones Corpfin Capital. AmRest completó la adquisición del 100% de Restauravia en junio de 2013, con la compra del 23,7% de participación que suscribían directivos de la compañía, encabezados por Steven K. Winegar y Malena Pato-Castell que, no obstante, se mantiene al frente de la filial española y, además, fue nombrada en octubre de 2014 presidente de división, sumando también la responsabilidad sobre los mercados de Alemania y Francia. Mientras, el 28,23% restante de Zena se mantiene en manos de la inversora española Alia Capital Partners, si bien Alsea podría tener opción de alcanzar el 100% del accionariado en un plazo de cuatro años desde la firma de la operación de compra.
Las operaciones de AmRest-Restauravia y Alsea-Zena se resolvieron con la sustitución del capital riesgo por sendas compañías industriales con amplia experiencia en la gestión de portfolios multimarca y grandes redes de establecimientos, tanto como propietarios y franquiciadores de enseñas como en calidad de licenciados maestros y eventualmente subfranquiciadores de grandes marcas internacionales. Ambas transacciones, además, han sido calificadas por varios expertos como “éxóticas”, no sólo por el origen de los compradores, ajenos a los grandes polos de Estados Unidos y Europa Occidental, sino por la circunstancia de que AmRest y Alsea terminaran adquiriendo unos grupos que habían sido puestos en el mercado con suficiente antelación y parecían abocados a su compra por inversores financieros, fondos o capital riesgo. De hecho, las mismas fuentes argumentan que ese private equity es el primero que llega a un mercado o sector para tomar posiciones cuando se inicia el cambio de ciclo, y que la “subasta” por Restauravia o Zena hubiera tenido otro resultado de realizarse hace unos pocos meses, cuando la recuperación casi acaba de iniciarse, pero se considera ya segura. En este sentido, según diversas fuentes, por Zena pujaron en la fase final la envasadora de 'Coca-Cola' Cobega y Cever, otro grupo mexicano diversificado que no habría renunciado a invertir en el sector de la hostelería en España. Pero, con anterioridad, la operación ya había sido estudiada por la inversora Lion Capital, aliada con el grupo Agrolimen, propietario de Eat Out, que habría presentado una oferta consistente en adquirir y consolidar ambos grupos españoles de restauración. Coincidentemente, Lion ya había renunciado en 2010 a la compra de la propia Restauravia, aduciendo entonces “el incremento del ratio de riesgo-país de España, en un momento en el que está captando nuevos fondos internacionales”.