Primera planta de pasta sin gluten

Precisamente, en el aspecto industrial, una de las noticias más imporantes de los últimos meses ha tenido como protagonista a la pasta sin gluten y más concretamente a Gallo, proveedor de este tipo de pasta para Mercadona, entre otras cadenas. La líder del mercado de pastas alimenticias decidió reactivar el centro fabril de Esparraguera, en Barcelona, que parecía abocado a su cierre y que ahora se ha convertido en la única planta en España centrada exclusivamente en la producción de pasta sin gluten. Hasta ahora ‘Gallo’ contaba con una gama específica para celíacos, si bien fabricada por un tercero fuera de nuestro país. Ahora, la nueva línea de pasta sin gluten se convierte en “una variedad clave para la compañía” , apuntan desde el grupo. ‘Gallo’ ha conformado una oferta que cubre todas las necesidades de consumo (sopa, tenedor y ensaladas), elaborada ya en Esparraguera. “Su composición es única y exclusiva, ya que contiene cuatro cereales y quinoa, y sus propiedades organolépticas son muy parecidas a las de la pasta de sémola de trigo duro. Su excelente sabor hace que el 99% de los consumidores que la prueban piensen que se trata de una pasta elaborada con sémola de trigo duro, como el resto de las gamas que ofrece Gallo”, explican desde la dirección.‘Gallo’ domina claramente la categoría de pasta sin gluten, con una cuota de mercado del 74,2% en valor y un crecimiento en ventas en distribución moderna en el último año del 28,8%. Lo cierto es que la pasta sin gluten prosigue su crecimiento en el mercado español, si bien todavía con una participación minoritaria. Así, en 2015, este tipo de pasta movió en hipermercados y supermercados de 7,2 M€ y casi 1.740 t, un 23,3% y 25,6% más, respectivamente, que el año anterior (datos Iri para un periodo de 52 semanas finalizado el 3 de enero de 2016). El precio medio es de unos 4,07 €/Kg, frente a los 1,57 €/Kg de la media del total de la pasta seca. Se trata, pues, sin duda, de una apuesta de valor añadido, a la que se suma la del propio valor de marca de ‘Gallo’.

En cualquier caso, la pasta sin gluten ha servido para dar viabilidad a una planta que estaba prácticamente sentenciada, lo que da idea de la proyección que están alcanzando los negocios ligados a estas intolerancias alimentarias. En esta categoría, en la que las marcas de distribuidor prácticamente no tienen representación, la segunda enseña en distribución moderna es ‘Sam Mills’, distribuida en España por la importadora de productos étnicos y sin gluten Mercontrol Estudios de Distribución. Esta última ha incorporado en los últimos meses distintas variedades de pasta de maíz con quinoa (macarrón, espagueti, espirales, etc.), en formato de 250 g. La compañía ha experimentado un incremento del 30% en la venta de pastas sin gluten en 2015. El pasado año, igualmente, comenzó a distribuir las galletas sin gluten de la marca de origen alemán ‘Coppenrath’.