La recuperación económica del sector de frutas de hueso es objetivo primordial para el Gobierno. De ahí la elaboración de un Plan con 14 medidas para ayudar a este grupo a superar las consecuencias de la crisis que viene arrastrando, desencadenada en gran parte por un desequilibrio entre la oferta y la demanda. Mientras el Gobierno y las organizaciones profesionales trabajan en conjunto, las compañías destacan la importancia de seguir produciendo fruta de calidad y con sabor, que fidelice al cliente y cautive a los consumidores de los nuevos mercados. Para ello, no dejan de invertir en reconversiones varietales, para ganar rentabilidad, y mejoras en las instalaciones.
La fruta de hueso viene arrastrando una crisis en los últimos años por el desequilibrio entre la oferta y la demanda. Tras una cosecha récord en 2017, las condiciones meteorológicas de 2018 ocasionaron una menor producción de fruta. Según los Avances de Superficies y Producciones de cultivo a octubre de 2018 del MAPA, se estima un descenso de la producción de fruta de hueso del 13%, al contabilizarse 1,81 Mt frente a los 2,10 Mt de 2017. La cosecha de melocotón se redujo un 20%, la de ciruela, un 17% (por problemas de cuajado), y la de nectarina un 11%. En cambio, la de albaricoque aumentó un 14%, mientras que la de cereza se mantuvo. Hay que destacar que otros países productores de nuestro entorno, como Francia e Italia -principales competidores en Europa-, también registraron descensos en su producción.
Ante este escenario, ¿cómo transcurrió la venta de frutas de hueso en el exterior? La exportación cayó un 23%, según datos aportados por Fepex para los primeros nueve meses de 2018. En total se exportaron 881.128 t, siendo el 40% melocotón, cuyas ventas bajaron un 23%; el 37% nectarina (-29%); el 12% albaricoque (12%); el 6% ciruela (-40%); y el 5% restante cereza (17%). En valor, el descenso en su conjunto fue del 5%, al ingresarse unos 1.019 M€. Pese al retroceso, el precio medio incrementó un 22% gracias a la buena cotización de la nectarina, albaricoque y ciruela. Alemania, Francia e Italia fueron los principales destinos. Ante la poca oferta, por ejemplo de ciruela, sus productores se centraron en los clientes europeos, dejando de lado destinos lejanos, como China, con protocolos complicados y tránsitos muy largos (unos 30 días). Precisamente en China se vendieron 209.670 t entre ciruela y melocotón, un 41% menos que en los diez primeros meses de 2017.
Plan de choque
Ante la situación de crisis, a comienzos de 2018 el Gobierno elaboró un plan para ayudar al sector con diferentes medidas, como por ejemplo inyectar liquidez, equilibrar el producto en los mercados, a través de la mejora de programas operativos de los productores, o la planificación y seguimiento de las campañas, entre otras muchas decisiones. Sin embargo, las diferentes organizaciones consideraron insuficiente el contenido de este plan, y manifestaron la necesidad de ayudas para el arranque de árboles (melocotón y nectarina), entre 10.000 y 12.000 ha, con presupuesto adicional como método de choque para reducir el exceso de oferta de los últimos años, lo que ha provocado también precios bajos en origen. Según Antonio Chavero, presidente del Comité de Fruta de Hueso de Fepex, se ha reducido la zona productiva en Andalucía, mientras que Extremadura la ha mantenido y Cataluña y Aragón la habrían ido aumentando.
Por otro lado, también se manifiesta la falta de organización, lo que perjudica al sector. Para Sebastián Escarp, presidente de Fruits de Ponent, se ha de crear grandes colaboraciones y alianzas “o será muy difícil hacer frente a las grandes plataformas de compras”. De ahí su decisión de integrarse definitivamente en grupo Anecoop, con la que venía colaborando desde hacía años. “Anecoop es un gigante comercial y queremos aprovechar sus circuitos comerciales para nuestra fruta”.
En lo referente a la cereza, se están buscando nuevos mercados. En 2017 se abrió el tailandés, y se están manteniendo conversaciones con el MAPA para trabajar la apertura del mercado chino, aunque aún falta mucho por hacer. Para David Manero, socio de la productora y exportadora Cerima Cherries, “cuantos más mercados asiáticos podamos abrir mejor, tanto por densidad de población como por la alta demanda de cereza en estos países”. Manero también reconoció que se estaban preparando para enviar grandes cantidades a Tailandia, pero finalmente no hubo ningún operador que exportara cereza a Tailandia, según datos de Icex. Otros destinos interesantes que se reconocen son EE.UU. y Canadá.
La calidad como pilar
¿Qué medidas están tomando los productores para paliar las consecuencias de la crisis del sector? Ante las dificultades, muchos optan por lo seguro, ya sea con la plantación de variedades consolidadas, para incrementar la rentabilidad, o por clientes de mercados afianzados. Otros, en cambio, trabajan para mejorar las variedades, lo que les permite llegar a destinos cada vez más lejanos como, por ejemplo, aseguran en Sol de Badajoz, cuyo objetivo es aumentar su volumen de exportación a países de ultramar. También El Ciruelo explica que buscan ventanas con menos competencia, “algo que no habría sido posible sin la reconversión varietal”. Desde la murciana, que espera comercializar este año 35.000 t de fruta de hueso gracias a las últimas plantaciones de paraguayos y albaricoques tardíos, añaden que “hay que ser muy fino a la hora de producir y vigilar cada detalle para ser competitivos”, y es que todo ya no vale, y no se puede producir a cualquier precio.
Otra medida que se está adoptando es la reducción de gastos, como por ejemplo Coop. Hortofrutícola Campos de Jumilla, que está minimizando y controlando los costes en la cadena de confección y almacenamiento, así como los indirectos. “Solo podemos pensar en minimizar costes y trabajar productos de calidad, ya que el precio lo marca el mercado”, añaden. Y es que, como hemos visto, la calidad del producto es el eje básico para la mayoría de los operadores. Así, desde SAT Royal explican que para lograrla trabajan en un programa de mejora genética. Cabe recordar que esta compañía es la única que cuenta con dos variedades exclusivas: ‘Pluot’ y ‘Metis’, y aunque aún no son muy conocidas, cada año se incrementa su demanda. Para Cosanse, es importante concienciar a todos los eslabones de la cadena, desde el socio hasta los trabajadores, de la importancia de la calidad, así como de la mejora del servicio al cliente y la fidelización, y, para esto último, está intentando establecer relaciones duraderas con valor para ambas partes, “que permitan dejar margen al socio”. Y es que, tal y como argumentan desde Fruit de Ponent, los mercados son cambiantes y nunca tienen un comportamiento igual. De ahí la importancia y la capacidad de saber adaptarse a las necesidades y exigencias de cada cliente. “Esto nos permite llegar a mercados lejanos como Brasil o Sudáfrica, cumpliendo los diferentes protocolos”, añaden desde Trecoop. “Esta versatilidad nos facilita buscar mercados lejanos cuando los precios en Europa no son los oportunos”, concluyen.
Inversiones y novedades
En el capítulo de novedades e inversiones destacamos la ejecutada por la compañía aragonesa 2R Fruits, que comercializa su fruta con la marca ‘Natusfruits’. Ha desembolsado 3 M€ para la compra de una parcela de 5.085 m² en la Plataforma Logística de Fraga y así construir una nueva central frutícola, que espera que entre en funcionamiento en el tercer trimestre de este año. También Sol de Badajoz y El Ciruelo están ampliando sus almacenes. La primera empleará 1 M€ para sumar 5.000 m² más a su central, actualmente con una superficie de 16.000 m², y la segunda destinará 2 M€ para la ampliación de su almacén de Alhama. Además, invertirá otros 3 M€ adicionales en nuevas plantaciones de uva y fruta de hueso.
Las mejoras en Fruit de Ponent, primer productor de frutas de hueso con 42.000 t, pasan por modernizar la zona de oficinas, los accesos a la central y por la instalación de placas solares en el tejado de 1,6 MW para su propio autoconsumo. Otras inversiones anunciadas son las de Trecoop y Cosanse. La primera, que en 2018 comercializó 13.500 t (-10%), ha reforzado sus equipos de producción al adquirir una máquina especializada en fruta plana (platerinas y paraguayos), lo que le permite incrementar el potencial de trabajo. Por su parte, Cosanse (12.000 t) compró una calibradora nueva en 2018 y reconoce que continuamente realiza renovaciones varietales para mejorar el producto. También Campos de Jumilla (11.000 t) asegura que está reemplazando variedades viejas por variedades nuevas con mejores aprovechamientos y mejores cualidades organolépticas. En las instalaciones ha realizado cambios en la gestión de la fruta para eliminar sobrecostes; y ha decidido apostar por aumentar las ventas en la distribución, más homogéneas y estables, en vez de arriesgar en los mercados tradicionales o en nuevos destinos.
Entre los productores de cereza, destacamos dos inversiones: Coop. del Campo de Navalconcejo, que en 2018 realizó mejoras post-cosecha con proceso de frío, para aumentar la calidad de la cereza e incrementar su vida útil; y Frutas AZ, que puso en marcha una nueva central de trabajo (2.000 m2), en la que se clasifica y empaqueta la fruta en el Valle del Jerte. Con esta nueva instalación quiere dar respuesta a la creciente demanda de cereza, y para ello cuenta con maquinaria de última generación y con las certificaciones necesarias para incrementar sus ventas en el exterior.
Por último señalar que la crisis del sector de los últimos años, unido a las dificultades financieras, ha llevado al cierre a algunos operadores, como Agromarket Spain Trading, Crex y su comercializadora Naturcrex.