Viscofan seguirá creciendo en 2017. Así lo desvelan las previsiones realizadas por sus responsables tras el cierre del ejercicio 2016, pese a cerrar este periodo con un descenso del 1,3% en sus ventas -que se situaron en 730,8 M-. Con todo, el beneficio neto al finalizar el año se situó en 125 M€, un 4,1% superior al registrado un año antes . Por áreas de negocio, las envolturas contribuyeron a la cifra global con 691,2 M (-0,5%), mientras las ventas de energía de cogeneración aportaron 39,6 M (-13,9%). El decrecimiento en evolturas vendría dado por el descenso en las ventas en los mercadoa latinoamericano y norteamericano . No obstante, el la segunda mitad del ejercicio, las condiciones del primero de estos mercados -principalmente Brasil- fueron mejorando, impulsando las ventas del grupo en la región. Tanto es así que los resultados del cuarto trimestre desvelan ya una mejora en la evolución del grupo, con beneficios de 36,9 M (+11,6%) y una facturación de 193,5 M, un 4,7% por encima de la contabilizada en el mismo trimestre del ejercicio anterior.

Así las cosas y vistas las oportunidades de crecimiento del grupo en los mercados en los que tiene presencia, Viscofan contempla optimistas previsiones de cara al cierre de 2017 . En lo que respecta a los ingresos, tiene previsto incrementarlos en la horquilla entre el 4% y el 7%; mientras espera un impulso de entre el 3% y el 7% en su ebitda y de entre el 0% y el 3% en la cifra del resultado neto . Con respecto a las inversiones presupuestadas para el ejercicio, serán en torno a 85 M , destinados en un 40% a mejoras en los procesos productivos, un 30% a ganar capacidad, un 7% a equipamiento energético y el 22% restante a otras partidas. La cifra mantendrá el nivel registrado en 2016, periodo en el que el presupuesto inversor alcanzó los 86,7 M, frente a los 57,3 M de 2015. Del montante global, un 51% fue destinado a capacidad y maquinaria y un 22% a mejora de procesos.

Entre los proyectos ejecutados por la multinacional durante el pasado año destacan las actuaciones iniciadas en Cáseda (Navarra). Por un lado, avanzó en las obras de la nueva planta de fibrosa, que se prevé operativa para la segunda mitad de 2017 y que absorberá un presupuesto de 20 M€; y, por otro, comenzó la construcción de una fábrica de plásticos con tecnología Nanopack, a la que está destinando 6 M€. En paralelo, la compañía realizó mejoras de productividad en sus centros de Alemania y República Checa y llevó a cabo la consolidación productiva de colágeno en sus instalaciones de China. Además, puso en marcha una nueva planta de plásticos en San Luis Potosí (México) y amplió la capacidad de extrusión de tripas de colágeno en Pando (Uruguay).