Mercadona ha cerrado un año récord, con crecimientos en los principales datos de su balance, a pesar de que la compañía está más centrada en la transformación de su red que en su expansión. Las ventas se han incrementado un 6% hasta los 24.304 M brutos y su beneficio neto ha crecido un 84%, alcanzando los 593 M, volviendo a situarse en línea con los resultados anteriores a 2017 (el dato antes de impuestos se eleva a 1.213 M). De dicho beneficio, 470 M se han reinvertido en la empresa como recursos propios, mientras el resto se ha repartido entre los accionistas vía dividendos.

En el último año, la partida de inversión se disparó un 50%, hasta los 1.504 M, el grueso de los cuales ha ido destinado a su red comercial (926 M), repartiéndose el monto restante entre la automatización de los bloques logísticos (257 M), la transformación digital (225 M) y el desarrollo en Portugal (60 M).

En este ejercicio, la valenciana puso en marcha 29 supermercados y cerró 20 "que no se ajustaban a los estándares de amplitud y comodidad de la cadena", además de reformar 215, concluyendo el año con un total de 1.636 supermercados operativos con una superficie global de 2,3 Mm2 (+4%). Entre las aperturas realizadas, el grupo destaca sus primeros centros en Ceuta, Melilla y la isla de La Palma, que han permitido a la compañía "completar su presencia en todo el territorio español".

Objetivos de 2019

Este ejercicio, la compañía prevé rebajar el ritmo de crecimiento y situar sus ventas en 25.200 M brutos, lo que supone un 3,7% más, mientras que el beneficio neto podría situarse en 435 M, un 27% menos que el obtenido el pasado año. Además, creará 1.000 nuevos puestos de trabajo, que se unirán a las 85.800 personas que actualmente conforman su plantilla (creó 1.800 empleos en 2018, incluyendo 300 en Portugal).

En el capítulo de inversiones, destinará 2.300 M a la apertura de 49 nuevos supermercados (10 de ellos en Portugal), la reforma de 390 para adaptarlos al nuevo modelo eficiente, a seguir desarrollando el proyecto de "Frescos Global" y a la implantación del universo "Listo para Comer". Este último servicio está presente ya en 17 puntos de venta, dos de los cuales se ubican en Madrid y Barcelona. Durante 2019, su objetivo es implantarlo en 250 locales, para lo cual están buscando proveedores.

Cabe destacar aquí que la cadena ha incluido sus primeras secciones para comer dentro de la tienda en dos establecimientos, en los que han puesto mesas y sillas, así como una nevera con bebidas frías y una máquina de bebidas calientes. Por contra, ha descartado la instalación de wifi y abrir los domingos en España. Sí abrirán todos los días de la semana sus tiendas portuguesas y además contarán con el servicio "Pronto a Comer", algo que ya tienen otros competidores como Continente, según ha explicado Juan Roig, porque en Portugal "está más desarrollado que en España".

10.000 M hasta 2023

Por otro lado, la valenciana ha confirmado que su inversión hasta el próximo ejercicio 2023 se situará en 10.000 M, un 18% más de los anunciados el pasado año (8.500 M), porque la empresa se ha dado cuenta que hay muchas cosas que "mejorar", asegura Juan Roig, el presidente de la cadena, en la presentación de sus cuentas anuales. De hecho, resume la situación asegurando que su compañía está "jugando muy fuerte, más fuerte que nunca en nuestra historia", porque Mercadona va muy bien, pero va a ir mucho mejor".

En el referido lustro, tiene programado abrir 60 supermercados, cerrar alrededor de un centenar y cambiar de ubicación alrededor de 400. El presidente hace hincapié en que algunas de las zonas que les quedan por desarrollarse serían Euskadi y algunas otras regiones, como Madrid capital. Y todo ello a través de desarrollo orgánico, ya que la empresa asevera que "no va a realizar adquisiciones", descartándose como posible comprador de la cadena DIA.Además, la cadena sigue manteniendo el referido horizont de 2023 como fecha para que toda su red comercial esté adaptada al nuevo modelo comercial eficiente.

Proyecto online

En 2018, Mercadona invirtió 225 M para continuar con su transformación digital. Actualmente, su supermercado virtual está presente en un total de 134 códigos postales y 97 poblaciones valencianas. Según los datos aportados por Juan Roig, este servicio factura 2,2 Mal mes y sus pedidos se han incrementado un 120%, todos ellos servidos a través de su "colmena" (almacen exclusivo para la venta online) de Valencia capital (P.I. Vara de Quart).

En este sentido, el grupo ha confirmado que el próximo 12 de junio entrará en funcionamiento la "colmena" que está construyendo en la zona franca de Barcelona capital, que conllevará el inicio del comercio online en Barcelona, aunque únicamente en el código postal de Les Cortes. Trabajarán 300 personas y, los cálculos, pasan por realizar unos 30.000 repartos mensuales. A ésta, le seguirá la primera de Madrid, a finales de 2019 o principios de 2020. "Creemos que vamos a tener mucho éxito", declara su presidente y que en ciudades como Madrid o Barcelona venderán más porque hay menos tiendas físicas. Además, el grupo tiene previsto abrir otras plataformas de este tipo en las principales capitales (Zaragoza, Bilbao, Alicante, etc) en los próximos años. Y es que, en palabras de Juan Roig "las empresas que no nos digitalicemos, desaparecemos".

Otro de los "objetivos claves" de Mercadona en 2019 será la eliminación de sobreesfuerzos y la optimización de su red logística, a través de la automatización de los bloques logísticos. De hecho, el grupo tiene un plan de inversión a cinco años para automatizar los almacenes más antiguos.

En lo concerniente a Portugal, Roig ha confirmado que el primer establecimiento se abrirá el próximo día 2 de julio en Canidelo (Vila Nova de Gaia), cerca de Oporto. En total, serán una decena las tiendas estrenadas, ubicadas en los distritos de Braga, Porto y Aveiro. El techo estimado por la compañía para este país es de unos 150-200 supermercados en un periodo de siete u ocho años. Alrededor del 50% de la oferta comercial de estos centros será diferente a la de los españoles, para lo cual están buscando proveedores. En 2018, las compras en Portugal ascendieron a 88 M.