Supermercados Sanchez Romero ha puesto a disposición de sus 400 trabajadores mil test rápidos de anticuerpos de detección del Covid-19, adquiridos la semana pasada, según explica la compañía, para que se realicen voluntariamente ante situaciones objetivas de riesgo y/o para evitar cuarentenas innecesarias. La empresa cuenta también con mascarillas, guantes y diverso material de protección, si bien, como ha sucedido en el grueso de la distribución, su recepción no ha estado exenta de problemas: "Desde un buen principio hicimos una adecuada previsión y estuvo a nuestra disposición en los almacenes de nuestro proveedor; sin embargo, fue retenido más de diez días por orden gubernamental", detalla su presidente ejecutivo, Enric Ezquerra. La distribuidora acaba de anunciar otras medidas nuevas para la plantilla, como la gratificación de una prima máxima de 250 € para el personal de tienda y la edición y publicación de la Guía COVID-19 para empleados y clientes. Sanchez Romero está realizando una segunda oleada de incorporación de personal para reforzar los servicios y canales de venta y de servicio a domicilio; según sus datos, el 25% de las ventas son entregas a domicilio, solicitadas a través de correo electrónico (35%), tienda online (25%), teléfono (25%), tienda física (12%) y WhatsApp y 'click & collect' (3%).

Estas medidas forman parte del plan de acción de la cadena madrileña para afrontar la situación derivada de la crisis sanitaria y el decreto de estado de alarma. Durante este periodo, se está trabajando bajo la supervisión de dos comités de crisis, uno, a nivel central y otro, a nivel de tienda, que se reúne de manera telemática a diario "y muchos días, con más de una convocatoria", explica Ezquerra, que también coordina "muchos otros grupos de trabajo en común y multifuncionales" a otros niveles.

Las tiendas se han adaptado a esta situación variando parte de su implantación y surtido. Como establece el decreto de estado de alarma, se han cerrado las zonas de restauración y consumo en los establecimientos que contaban con este servicio. "Hemos despejado la sala de ventas, especialmente en la zona de cajas y, en algunas tiendas que lo precisaban, la zona de pasillo, para disponer de más espacio para guardar las distancias de seguridad; algunos espacios promocionales e implantaciones adicionales las hemos utilizado para productos de alta rotación; y en categorías con alto componente de celebración (pastelería, pescado salvaje y mariscos...) hemos adaptado el surtido a las necesidades actuales", según Ezquerra. La oferta de producto se ha reforzado en las áreas de surtido de droguería, higiene, perfumería y hogar pero, por contra, ha supuesto la paralización de los procesos de introducción de nuevos productos, "ya que hemos tenido que centrarnos en el abastecimiento y en la reposición de las tiendas", concluye el presidente ejecutivo de Sanchez Romero.

Por último, el director general del grupo, José Mª Rubio, ha entregado, en nombre de la cadena, una donación de mil mascarillas autofiltrantes N95, del mismo tipo que las que utilizan los empleados de tienda, para el Hospital Puerta de Hierro de Majadahonda (Madrid).