Ayer se celebró el Día Mundial del Medio Ambiente, una fecha clave para concienciar de la importancia de protegerlo y preservarlo si queremos garantizar la sostenibilidad de nuestro planeta. En este marco, las grandes compañías de la distribución han puesto de manifiesto algunos de los logros conseguidos, como parte de su compromiso con la sociedad y el medio ambiente, y en alineación a los objetivos de desarrollo sostenible de Naciones Unidas para combatir el cambio climático.
Algunas de las medidas más importantes llevadas a cabo por el sector en los últimos años ha sido la sustitución de las bolsas de plástico por otras respetuosas con el medio ambiente, bien de papel, compostables o de plástico reciclado reutilizables. También se está incrementando el surtido de productos sostenibles. El Corte Inglés, por ejemplo, acaba de superar las 120.000 referencias en su portfolio, un 10% más con respecto al ejercicio anterior, la mitad de ellas pertenecientes a sus diferentes marcas propias.
Además, la compañía está participando actualmente en un proyecto de reducción del plástico utilizado en los transportes internacionales de mercancía. A través de esta colaboración entre El Corte Inglés y sus proveedores se está minimizando el embalaje plástico. En este sentido, se ha desarrollado un proyecto piloto en el que se eliminan los embalajes individuales de determinadas prendas con un destino distinto al del almacenaje. "El piloto ha sido un éxito ya que para una muestra de 1,8 M de unidades se ha conseguido un ahorro en el packaging de casi 5 tm de material plástico", señala la firma madrileña.
Los envases plásticos están sometidos a una creciente regulación enfocada a impulsar una economía circular. Entre otros aspectos, las diferentes normativas europeas, nacionales y regionales impulsan la reutilización de estos envases que, en el caso de los destinados al uso alimentario, supone un reto a la hora de garantizar su seguridad tras repetidos usos y lavados. Para garantizar la seguridad de los envases alimentarios de varios usos y que estos mantienen sus propiedades tras repetidos lavados, AIMPLAS, el Instituto Tecnológico del Plástico ha creado su propio certificado, 'Designed to be Reusable'.
Por otra parte, la empresas de la distribución trabajan para lograr la implantación del sello 'Residuo Cero de AENOR' en sus centros. El Corte Inglés pretende conseguir este sello para todas sus plataformas logísticas este año. En la actualidad más de 108 establecimientos del grupo cumplen ya con esta certificación. Este sistema de gestión ha logrado demostrar que todos los residuos generados, se gestionan y se valorizan al menos en un 90%, evitando el depósito en vertedero. Lidl fue una de las compañías pioneras en la consecución de este distintivo en 2017 en su plataforma logística de Alcalá de Henares (Madrid).
Asimismo, de manera generalizada, la gran distribución está priorizando criterios de sostenibilidad ambiental y eficiencia energética en el diseño de sus nuevas instalaciones. Lidl también fue una de las primeras cadenas en instalar placas solares fotovoltaicas en sus tiendas, pero también Mercadona, El Corte Inglés, Carrefour o Eroski lideran esta tendencia, como medida de gestión sostenible y ahorro de costes. Además, para reducir la huella de carbono se están implantando puntos de recarga de vehículos eléctricos en los aparcamientos. Entre las iniciativas más destacadas, el objetivo de El Corte Inglés es que en 2025 los puntos de recarga asciendan a más de 2.000.
Además de las tiendas, las plataformas logísticas están sirviendo para la generación de energía. Lidl, por ejemplo, ya ha alcanzado el 100% de electricidad obtenida por fuentes renovables en todas las tiendas y plataformas. Adicionalmente, persigue ser neutra en carbono para finales de 2022, tras reducir también un 80% sus emisiones de CO2.
Entre los nuevos proyectos, Condis prevé iniciar de forma inmediata la construcción de un parque de energía solar en su sede central de Montcada i Reixac (Barcelona), ocupando 6.750 m2, con una potencia aproximada de 1,1 Mwh y una inversión de 800.000 €. Spar Gran Canaria es otra de las cadenas que apuesta firme por el uso de energías renovables. Gracias a la ampliación de la planta de generación de energía solar fotovoltaica en la central logística de El Goro, ha duplicado la potencia instalada con un total de 82kWp, multiplicando a la vez la energía producida, que es consumida en su totalidad por la plataforma logística de la compañía. La canaria ha invertido en los últimos años 1,95 M€ destinados a la ampliación de las plantas generadoras de energía solar fotovoltaica en sus dos centrales logísticas, a la instalación de puntos de recarga para vehículos eléctricos y a la incorporación de vehículos 100% eléctricos a su flota. Además, la cadena realizará próximamente una tercera ampliación de su planta fotovoltaica con la instalación de 1.724 nuevos paneles y prevé continuar reduciendo las emisiones de CO2, habiendo conseguido aminorarlas el año pasado 605 toneladas gracias al uso de energías renovables, la movilidad eléctrica, el reciclaje, la reutilización de materiales y la mejora de la eficiencia energética en tiendas y centrales logísticas.
Covirán también incide en que en 2021 emitió 1.465 toneladas de CO2 menos gracias a las mejoras técnicas introducidas en sus supermercados, en la cadena de suministro de las plataformas logísticas y a los acuerdos con productores locales de kilómetro cero.
Consum, por su parte, se compromete a ser neutra en emisiones de alcance 1 y 2 en 2030. Esto incluye las emisiones directas de la cooperativa, procedentes de los vehículos de la organización, las fuentes fijas de emisiones, así como las emisiones generadas por las fugas de gases refrigerantes (alcance 1) y las emisiones asociadas a la producción de la electricidad que necesita Consum para ejercer su actividad (alcance 2). Además, ha sido una de las primeras cadenas de supermercados española en adherirse a la Iniciativa de los Objetivos Basados en la Ciencia en enero de 2022 (SBTi, Science Based Targets Initiative). El SBTi nace como una colaboración entre la Fundación Mundial para la Naturaleza (WWF), el Proyecto de divulgación del carbono (CDP), el UN Global Compact y el Instituto global de los recursos (WRI). Desde 2015, Consum ha reducido su huella de carbono un 84%, fruto de la incorporación de gases refrigerantes de temperatura negativa, alimentada con CO2 en las aperturas, los supermercados ecoeficientes y la mejora de los vehículos de la flota logística. A esta reducción de la huella de carbono también ha contribuido tanto los proyectos logísticos TEO y Nodriza, con ahorros de más de 8,3 Mkm, como la inversión en vehículos ecoeficientes. Durante 2021, la cooperativa destinó 67,2 M€ a gastos e inversiones ambientales.