El especialista en tecnología de etiquetado de frutas Sinclair y el comercializador de kiwis Zespri han dado el primer paso en España en cuanto a etiquetas compostables para frutas, un requisito que en breve se exigirá desde la Unión Europea como parte del futuro Reglamento de Envases. Ambas compañías han lanzado conjuntamente ‘T55’, una innovación para la sección de frutería que ofrece la misma eficacia que las etiquetas plásticas convencionales y una excelente adherencia a frutas y hortalizas, lo que permite mostrar información esencial (origen, variedad, códigos PLU y de barras, etc.).A la vez, se descompone y biodegrada sin dejar ningún tipo de residuo dañino, lo que reduce los desechos y facilita su eliminación, ya que puede depositarse directamente en los cubos de compostaje doméstico, junto con cáscaras de frutas y otros restos orgánicos. El objetivo de Zespri es “sustituir todas nuestras etiquetas por esta nueva totalmente compostable durante un periodo de transición en el próximo año”, ha explicado el CEO de la compañía, Jason Te Brake.