El fondo de inversión Atitlan -presente en diversos sectores como el agroalimentario, industrial, servicios o el financiero- ha comunicado la adquisición de la hortofrutícola Frutas Romu. La operación, que se cerrará durante las próximas semanas, se realizará sobre el 100% de los títulos de la familia Rodríguez Murcia y, según fuentes internas, atiende a “un proyecto a largo plazo en un mercado con potencial de crecimiento”. Atitlan se suma a otros capital riesgo como Abac Solutions, Miura Private Equity o Cinven que, en los últimos tres años, también se han fijado en empresas del ramo.
La sociedad compradora ha informado que no es la primera incursión que lleva a cabo en el sector primario, ya que está presente desde 2007 en Elalia, compañía dedicada al cultivo en seto de olivar y almendro en más de 15.000 ha. Después, en 2012, entró en Sea8, que centra su actividad en la cría de lenguado. También estuvo presente en el accionariado de Verdifresh, hasta que Joaquín Ballester se convirtió en 2011 en el único accionista.
Frutas Romu, por su parte, se dedica a la producción y comercialización de cítricos. Para ello, opera más de 1.300 ha de cultivo en Murcia, la Comunidad Valenciana y la provincia de Huelva; de las que recoge unas 40.000 t anuales entre clementina (35%), naranja (30%), limón (25%) y satsuma (10%). Alrededor del 90% del volumen se dirige al exterior, sobre todo a Reino Unido. En 2018 facturó 34,24 M€ y cerró el año con unas pérdidas de 2,02 M€.
“Volvemos a invertir en el sector primario, apostando por un proyecto a largo plazo en un mercado con un gran potencial de crecimiento. Para nosotros, el proyecto es especialmente interesante, ya que nos permitirá impulsar la expansión del grupo y reforzar nuestra posición en este mercado”, ha declarado Francisco Llopis, responsable del área en Atitlan.
Cada vez más fondos se interesan por entrar en el accionariado de compañías hortofrutícolas. Por ejemplo, el caso más reciente corresponde a la adquisición del 51% de Agroponiente, que abarca una amplia variedad de productos e integra varias comercializadoras y productoras, por parte de la firma Abac Solutions. “El sector necesita profesionalizarse y desarrollar grupos fuertes para poder competir internacionalmente”, explicó en el momento de la compra el presidente de Agroponiente, Diego Amat. También Miura formó en 2017 Citri&Co a raíz de la adquisición de varias sociedades citrícolas, con el objetivo de crear un partner internacional de cítricos para las grandes superficies.
Precisamente, Miura Private Equity fue pionera en apostar por esta fórmula con la entrada (25%) en el accionariado de Martinavarro en el verano de 2016. Sin embargo, ese mismo año Cinven también compró Plantas de Navarra, S.A. (Planasa) por las “perspectivas de crecimiento internacional” y las “oportunidades de expansión geográfica”. Estos argumentos fueron compartidos por ProA Capital cuando adquirió menos del 50% de Moyca Grapes, S.L. con el propósito de fortalecer su capacidad financiera. Fruto de ello, está siendo el plan de internacionalización que inició con sus uvas de mesa para llegar al Golfo Pérsico, Oriente Medio, Asia y Canadá, además de las principales economías europeas.