Las alternativas vegetales a la carne ahora se dirigen a un consumidor omnívoro pero concienciado, por motivos éticos o medioambientales, con reducir su ingesta de proteína animal. El elaborado que ha adquirido más popularidad ha sido la ‘hamburguesa vegetal 2.0’ y, entre ellas, ‘Beyond Burguer’. Tras debutar en food service y el canal especializado, esta estrella mediática llegó a la gran distribución en julio a Supermercados Sánchez Romero de la mano de Zyrcular Foods (participada por accionistas de Valls Companys) y, poco después, a ‘Hipercor’, de El Corte Inglés, distribuida por Bormarket. En paralelo, otras alternativas de base vegetal han logrado sus propios acuerdos, como ‘Heura’, de Foods for Tomorrow, con Spar Gran Canaria. Pero Sánchez Romero siempre se ha vuelto a adelantar con otros elaborados, como ‘Beyond Sausage’ (‘salchichas’) y la enseña australiana de pollo ‘Next’, también distribuida por Zyrcular. Para quienes no estén dispuestos a desembolsar los 6-7 € que cuestan dos unidades, Lidl acude al rescate este mismo diciembre con el lanzamiento de su enseña propia ‘Next Level’, con un precio un 50% inferior.
Dentro de la ola saludable, la granada está de moda por sus cualidades antioxidantes y todo apunta a que será la digna acompañante de las naranjas en la exitosa implantación en los supermercados de máquinas exprimidoras de zumo en autoservicio. Lidl, Plusfresc y Condis ya cuentan con equipos de la fabricante Zummo pero es Carrefour la que destaca por su proyecto más amplio: desde hace un año cuenta en tres de sus hipermercados españoles con un córner con seis máquinas exprimidoras de naranjas, limas, limones, mandarinas, pomelos y granadas. En el caso de los cítricos, la variación es mínima de un equipo a otro, si bien para las granadas se requieren adaptaciones más específicas.
El grupo francés Fast Concepts, también especializado en la distribución de exprimidoras industriales denaranjas, ha dado una vuelta de tuerca a este concepto con la introducción de una máquina dispensadora de cerveza en autoservicio. Ofrece dos sabores distintos, se sirve a 3º en latas reciclables y se ha testado en un ‘Carrefour’ parisino de proximidad. Dada la apuesta de las cadenas españolas por acercarse a la restauración, es factible pensar que este equipamiento comience a formar parte de la sala de venta de muchos establecimientos.
La lucha contra el desperdicio alimentario origina diversas iniciativas entre las distribuidoras, algunas de las cuales suponen un cambio de 180º respecto a las prácticas que hasta ahora se habían llevado a cabo. Por ejemplo, Carrefour ha puesto en marcha una prueba piloto en unos pocos establecimientos de Francia y Bélgica para poner a la venta productos que han sobrepasado su fecha de consumo preferente (que no la de caducidad), pero que no suponen ningún riesgo para la salud de los consumidores; simplemente puede que muestren cambios de sabor, olor o textura. La cadena francesa expone estos productos en un mueble específico con descuentos hasta del 50%, según ha explicado su director corporativo de RSC, Bertrand Swiderski, a la revista especializada Lineàires. Además, también está trabajando en eliminar la fecha de expiración en productos como caramelos, azúcar, sal o vinagre.
Pese al foco que las distribuidoras están poniendo en la alimentación en detrimento de otras líneas de productos, el textil es una de las pocas categorías secundarias que se mantiene e, incluso, se trata de utilizar como elemento diferenciador. A los distintos esfuerzos que se han realizado en ejercicios anteriores, esta año se ha sumado también aquí la variable de la sostenibilidad, ya que esta industria pasa por ser la segunda más contaminante del planeta. Este otoño, tanto Carrefour como Auchan han lanzado sendas colecciones teniendo en cuenta este criterio. La primera, bajo su marca ‘Tex’, una gama de ropa para bebés, niños y hogar en algodón bio y fabricada por pequeños productores. ‘In Extenso’, la marca propia de Auchan, un surtido de prendas “sostenibles”, teniendo en cuenta tres criterios: uso eficiente del agua, cero generación de residuos y fomento del uso de materiales reciclados, como algodón reciclado para pantalones vaqueros y denim reciclado para la etiqueta interior. La palma en reutilización se la ha llevado la filial de Aldi en Países Bajos, que, como Carrefour el año pasado con su colección de bañadores para niño y hombre, incorporó en octubre la distribución de prendas y complementos fabricados con botellas de plástico recicladas. Esta colección pertenece a la marca ‘Trashcode’, lanzada por las firma locales Waste2Wear y The Cookie Company Group.