El sector azulejero ha recuperado la sonrisa. Tras verse obligado a realizar un fuerte ajuste tras la llegada de la crisis y pasar una dura travesía del desierto, la industria cerámica española navega de nuevo a toda máquina. El sector acaba de cerrar su tercer año consecutivo en positivo impulsado por las exportaciones, aunque lastrada aún en el mercado doméstico, que se dejó de nuevo un 3%. Con una producción de 420 Mm2 en el último año y lejos aún de los 630 Mm2 fabricados allá por 2007, las expectativas son halagüeñas para un sector que mira ya más hacia adelante que hacia la crisis pasada. Con estos buenos datos, los fabricantes están retomando las inversiones industriales para ganar competitividad y ampliar capacidad. Además, numerosas de las factorías cerámicas que fueron víctimas de los primeros años de la crisis han reiniciado su producción gracias a la toma en gestión por parte de otros operadores. Fueron muchas las azulejeras que, como en otros sectores de la industria de materiales para construcción, se vieron obligadas a echar el cierre tras no poder afrontar las deudas contraídas con la drástica caída de las ventas. Sin embargo, algunas de esas factorías han vuelto recientemente a la vida al ser adquiridas por otros fabricantes que buscan ahora implantarse o mejorar su presencia industrial.
Uno de las más activas en este sentido ha sido Argenta Cerámica que arrancó a mediados de 2013 la producción en la planta que Arce Cerámica, en liquidación, gestionaba en la localidad de Villafamés. La planta, en régimen de alquiler, es gestionada ahora por la filial Prane Proyectos e Inversión, y supone su segunda etapa en manos de Argenta, que ya la utilizó durante dos años hasta diciembre de 2012. Con capacidad para 24.000 m2, la producción de la factoría se comercializará con la nueva marca ‘Lotus’. Sin embargo, no es la única planta que Argenta ha incorporado ya que la azulejera produce desde 2011 en la fábrica que la antigua Ballesmar, ya desaparecida, tenía en Onda. Las inversiones que su nueva propietaria ha realizado recientemente, con la incorporación de un nuevo horno, han elevado la capacidad de dicha planta hasta los 20.000 m2 al día. En conjunto, Argenta ha invertido cerca de 12 M€ en mejoras industriales, que incluyen nuevas prensas y una instalación de rectificado en sus instalaciones centrales de Vall d’Alba, que han dejado su capacidad conjunta en 62.000 m2 diarios. En la misma línea, el grupo STN está acometiendo inversiones de 15 M€ para ampliar su fábrica de Nules con 28.000 m2 diarios de azulejos. Además, el grupo ha presentado ya una oferta para hacerse con la fábrica de Alaplana en Xilxes, con capacidad para 10 Mm2 anuales. Alaplana entró en liquidación el pasado año y tiene en venta su unidad productiva.