El consumo de cemento en España cerró el año 2018 con una subida del 8%, lo que, frente al avance del 11% en 2017, supone una cierta desaceleración. Este crecimiento resulta a todas luces insuficiente dentro de un sector que se encuentra todavía al 40% de su capacidad instalada. Además, las exportaciones se saldaron con una disminución del 5%, lo que ha generado cierto baile en las posiciones de los tres principales fabricantes, las multinacionales Portland Valderrivas, Cemex y LafargeHolcim.