La constructora Arción Construcciones , con sede en Valencia, ha sido declarada en concurso voluntario de acreedores a mediados de agosto tras no poder renegociar su deuda con la banca, objetivo por el que se había acogido a la figura del preconcurso en marzo pasado. Sus problemas financieros habían obligado a la constructora valenciana a aplicar en junio un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para cesar a 136 trabajadores , prácticamente toda su plantilla. Este ajuste se suma al expediente temporal puesto en marcha en febrero en su división de construcción, que se extendería durante un año. Asimismo, la falta de liquidez obligó a la suspensión de varios contratos con diversas administraciones como la rehabilitación de la nueva sede de la Cámara de Comercio de Valencia y el nuevo campanario de Murla (Alicante), así como el contrato de mantenimiento de comisarías de policía para el Ministerio del Interior.

Asimismo, el pasado febrero iniciaba su liquidación Urbanizadora Cuatre Carreres , y con ella, uno de los proyectos urbanísticos determinantes para Arción, 1.700 viviendas enmarcadas en el PAI Quatre Carreres, en el barrio valenciano homónimo. Para ello, Arción, a través de su participada Urvacem 2000, se alió con la división inmobiliaria de Caja Castilla-La Mancha, con la que compartía al 50% la titularidad de Urbanizadora Cuatre Carreres. El proyecto, paralizado hasta 2010 por la falta de liquidez, fue retomado en esa fecha con la construcción de dos torres que sumaban 169 viviendas . El resto fue descartado tras la intervención de Caja Castilla-La Mancha por el Banco de España. Al cierre de 2011 -último dato conocido-, Arción sumaba un pasivo de 38,32 M€, de los que 32,85 M correspondían a acreedores comerciales. En el mismo periodo, obtuvo una facturación de 47 M, lejos de los 91,50 M que llegó a obtener en 2008.