En apenas dos años Seop ha pasado de ser una de las principales constructoras nacionales a convertirse en una empresa actualmente en concurso que quiere remontar el vuelo. Para conseguir este cambio, un grupo formado por los actuales directivos de la compañía, encabezados por su director general, Santiago Gilarranz Martín, y David Cabal Lorenzo, nuevo administrador único, se ha hecho con el control de la constructora.
La constructora madrileña, que desde abril de 2008 se encuentra en concurso de acreedores, con una deuda de 267 M€, estaba controlada por la familia Montalvo e integrada en el grupo Silver Eagle, aunque tras la compra, efectuada mediante una operación de management buy out a comienzos de este mes, abandona definitivamente el grupo y pasa a estar controlada al 100% por Wincott Tres Internacional , sociedad patrimonial creada por sus directivos. En la operación se ha incluido a Teginser , otra filial de Silver Eagle que, a diferencia de Seop, no entró en concurso, por lo que puede optar a contratos públicos, algo que por ley no puede hacer Seop hasta que abandone el concurso. La compra de Teginser se considera por tanto estratégica, ya que el objetivo de los nuevos dueños es reorientar el negocio de Seop hacia la obra civil.
Los nuevos propietarios de Seop deberán conseguir un convenio con sus acreedores, tras ser rechazado el presentado hace dos años, y devolverle la estabilidad a la compañía, cuyo tamaño se ha reducido de manera considerablemente. Si en 2007 facturaba 440 M€, en el último ejercicio alcanzó los 35 M€, y su plantilla se ha reducido un 90%, pasando de 1.100 trabajadores a los actuales 104.
Con la venta de Seop y Teginser, el grupo Silver Eagle se encuentra prácticamente desmantelado. De la media docena de sociedades que lo componían, ya sólo quedan la promotora Seif Residencial, la gestora Sedi Gestión Inmobiliaria y la sociedad de cartera Silver Eagle de Inversiones y Financiaciones, todas con escasos ingresos. A comienzos del pasado año la familia Montalvo se deshizo de su participación en las promotoras madrileñas Alcalá 120 Promociones y Gestión Inmobiliaria (49%) y Seif-Procam (50%) , constituidas junto al grupo Procam, a cambio de que La Caixa, propietaria de Procam, le condonara parte de su deuda.
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