El consumo de cemento en España cerró el pasado ejercicio 2024 con un crecimiento del 2,9%, según se desprende de los últimos datos publicados en la Estadística del Cemento, recogidos por la patronal española del sector Oficemen. En valores absolutos, el consumo de cemento se ha situado en 14.880.019 t, lo que supone mejorar en 418.294 t los resultados obtenidos 2023, aunque con una cifra muy similar a la registrada en 2021 y 2022.
Para Alan Svaiter, presidente de Oficemen, "este crecimiento corrobora la progresión en positivo que ha experimentado el consumo de cemento en nuestro país durante la segunda mitad del año, después de unos primeros meses de arranque en número rojos, tal y como vaticinamos al inicio del ejercicio”. En este sentido, el consumo acumulado anual permaneció en números rojos hasta octubre, mes en el que se situó por primera vez en un crecimiento del 1,3%, un dato que fue mejorando hasta alcanzar el 2,9% con el que se ha cerrado el año. Por lo que respecta a los datos mensuales, en diciembre el consumo creció un 10,4%, situándose en 1.168.767 t, casi 110.000 t más que en el mismo mes de 2023.
Según los últimos datos disponibles de consumo de cemento por tipología de obra, que llegan hasta el tercer trimestre del pasado año, el 46% tuvo como destino la obra pública y el restante 54% la edificación, incluyendo residencial (33%), no residencial (13%) y rehabilitación (8%).
Con los datos sobre obra pública que hay hasta la fecha, desde la patronal señalan que "nuestras estimaciones apuntan a que el consumo de cemento podría crecer en torno al 5% en 2025", indica Svaiter. Además, señaló que "el consumo de cemento en nuestro país se mantendrá alrededor de los 15 millones de toneladas por séptimo año consecutivo”.
En cuanto a los datos de comercio exterior, la exportaciones cayeron un 8,3% en 2024 y se sitúan en 4,82 Mt, cuando un año antes se encontraban en los 5,26 Mt. Por su parte, las importaciones de cemento y clínker han registrado un crecimiento del 37,6% para situarse en 1,37 Mt.
Principales retos del sector cementero
Aunque la industria cementera afronta múltiples retos en la actualidad, el primero, sin duda, es la descarbonización, un desafío compartido por todos los sectores industriales. Respecto a la neutralidad climática, Oficemen está actualizando su hoja de ruta, estableciendo objetivos más ambiciosos. En esta línea la industria cementera espera reducir en un 44% las emisiones de CO2 por tonelada de cemento para 2030; y fija un nuevo objetivo intermedio del 83% para 2040. “Y si se dan las condiciones propicias para cumplir ambos hitos, esperamos alcanzar en 2050 incluso emisiones netas negativas en la producción del cemento”, explica Alan Svaiter.
Para ello, desde Oficemen se apunta la necesidad de que España, al igual que otros países del entorno, marque al fin una estrategia que incluya proyectos país para el desarrollo de las tecnologías de captura, transporte, almacenamiento y uso del CO2 (tecnologías CAUC), imprescindibles para mitigar las emisiones de proceso de sectores como el del cemento. Además, se considera necesario contar con líneas de financiación permanentes a los procesos de descarbonización industrial.
España necesita que la Compra Pública Verde sea una realidad
La Ley de Contratos del Sector Público obliga a que el 51% de los criterios de adjudicación de una obra sean criterios objetivos. Hasta la fecha, los criterios objetivos se ceñían a criterios estrictamente económicos, pero los criterios ambientales aseguran desde la patronal que deben priorizarse.
En este sentido, Oficemen insiste en que el desarrollo del capítulo XII del nuevo Reglamento de Productos de Construcción y en particular de su artículo 83 sobre Contratación Publica Ecológica, debe ser una prioridad tanto para la nueva Comisión Europea como para la Administración española. Precisamente, el pasado mes de septiembre, 24 organizaciones de 11 sectores diferentes, firmamos la Declaración de Granada, manifestando la necesidad de promover el uso de materiales sostenibles y bajos en carbono en las contrataciones públicas y privadas.
“Desde el sector cementero estamos realizando grandes esfuerzos en I+D+i para lograr nuevos cementos bajos en carbono, pero no servirá de nada si en las licitaciones públicas no se promueve su uso”, finalizó el presidente de Oficemen.