El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado la convocatoria de un nuevo Perte (Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica) que se centrará en impulsar la construcción de vivienda industrializada. El proyecto contará con una inversión pública de 1.300 M€ a diez años, aunque también buscará movilizar la participación privada. "Hay que construir más, mejor y más rápido", ha insistido Sánchez, durante la presentación del nuevo Perte en la feria Rebuild, celebrada estos días en el recinto del Ifema, en Madrid.
El objetivo es paliar el déficit de vivienda, con la construcción de 15.000 casas industrializadas anuales y "que podamos llegar a las 20.000 anuales dentro de diez años", en un ámbito en el que España tiene un "amplio margen de mejora". De hecho, en nuestro país las viviendas industrializadas apenas representan el 5%, muy lejos de los porcentajes del 20% que alcanza en Alemania o Países Bajos, o del 20% de Reino Unido. Entre las causas de esta demora en la industrialización destaca "la falta de financiación adecuada para este tipo de proyectos". En este sentido, uno de los objetivos del nuevo Perte será "favorecer una financiación adaptada a esta actividad particular para permitir que la iniciativa privada se pueda sumar". Para ello, se pondrán en marcha diferentes instrumentos, entre los que se encuentran varias líneas de financiación del Instituto de Crédito Oficial (Ico), y tratará movilizar también la inversión privada. "Necesitamos de todas las manos para transformar la manera de construir y mejorar nuestra forma de vivir ya que la dimensión del desafío lo exige", ha apuntado el presidente, que ha reconocido que "acceder a una vivienda digna en condiciones asequibles es un sueño imposible para muchas familias".
Este Perte de la industrialización de vivienda, que pone el acento en la colaboración público-privada, se articula en torno a tres ejes estratégicos: el aumento de la capacidad productiva, la eficiencia y sostenibilidad y la formación y talento. Por un lado, buscará incrementar la producción industrial de vivienda, para lo que se implementarán líneas financieras concretas que apoyen a las pymes, y se creará un marco regulatorio que fomente la industrialización.
Por otro lado, se promoverá la rapidez de la construcción, teniendo en cuenta que la industrialización del sector puede a reducir los tiempos entre un 20% y un 60%. Además, se pondrá el foco en la eficiencia energética, así como en la reducción del impacto medioambiental y los residuos. Por último, se centrará en la mano de obra, mediante la colaboración con universidades y centros de formación profesional, para lograr perfiles más técnicos y atraer también a jóvenes y mujeres al sector. Sánchez ha defendido que "a construcción del mañana tiene que dignificar la profesión".
El nuevo Perte tendrá su epicentro en Valencia, donde se ubicará la Ciudad de la Construcción Industrializada. En concreto, se situará en la Zona de Actividades Logísticas del Puerto de Valencia, en un suelo titularidad de Sepes, y albergará tanto iniciativas industriales como centros de formación especializada. El Gobierno quiere que este proyecto contribuya a la reconstrucción del tejido económico arrasado por la DANA.