Según una información de última hora, Metro Group y su división Media Saturn están evaluando la posibilidad de vender su red de grandes tiendas electro 'Saturn' en Francia, bien en una parte o en su totalidad, dentro de una serie de posibilidades estratégicas que se contemplan. Al parecer la compañía alemana habría iniciado ya conversaciones con HTM Group (familia Mulliez, propietarios entre otras de cadenas como Boulanger, Auchan, Electro Dépôt o Surcouf) como un potencial inversor. Otras alternativas que se contemplan incluyen el lograr algún acuerdo con socios estratégicos de cara al desarrollo de la actividad en dicho territorio o simplemente seguir adelante con una nueva estrategia de crecimiento. En estos momento, cualquier posibilidad estaría sobre la mesa en el proceso de evaluación que está llevando a cabo el grupo. Según indica el propio comunicado, la compañía tomará en cualquier caso la decisión que resulte más beneficiosa para los empleados, con cuyos representantes ya habrían iniciado los contactos.
Media Saturn opera en Francia 34 establecimientos 'Saturn' en su totalidad, hecho singular con respecto a la estrategia más común del grupo de implantar sus dos banderas ('Media Markt'). Según dicho comunicado, la venta minorista de electrónica de consumo en Francia sigue estando muy lastrada por el difícil entorno económico adverso.
Por otra parte, según recoge el Financial Times, algunos analistas como Juergen Elfers, de Commerzbank, atribuyen a la filial francesa el haber cosechado números rojos desde mucho tiempo atrás, además de tener uno de los ratios más bajos de ventas por metro cuadrado de todo el conjunto de establecimientos del grupo en Europa. La adopción de esta medida supone según el analista citado por FT un claro aviso a navegantes para todos los responsables de negocio del grupo a la hora de buscar caminos hacia la rentabilidad. Según recoge el citado medio, la red francesa de tiendas 'Saturn' movió en el último año 583 M€ frente a los 807 M del año anterior. Al margen de esta situación, la competencia a la que se ha enfrentado siempre el grupo germano en Francia ha sido siempre muy acusada, precisamente por el peso de operadores como Fnac y Conforama (PPR), Darty (Kesa) o la misma Boulanger.