Con lo últimos coletazos de la crisis, los proveedores de embalaje logístico, un mercado muy amplio que en este reportaje se centra en consumibles (film, bolsas, saco, fleje y cinta adhesiva), cajas, contenedores y palés de plástico y palés de madera, pueden felicitarse de haber superado, en su mayoría una etapa dificilisima a base de reinventarse. De ser meros fabricantes o importadores, las firmas implicadas han sabido ofrecer a su cliente una versión mejor como auténticos consultores, de forma que sus clientes han visto en ellos una herramienta perfecta para reducir costes. La situación ha sido propicia para todas las compañías en la medida en que la economía española ha pasado a preocuparse por expandirse más allá de nuestras fronteras en busca de nuevos mercados, a los que son difíciles de acceder salvo que se cumplan medidadas de seguridad para las cargas que suelen ser más elevadas. Ha sido llamativo especialmente el caso del palé de plástico, una solución que ha ganado enteros frente al modelo tradicional de madera pese a que sus costes se multiplican en algunos casos por diez.