Jerónimo Pérez Limón, director de compras de Acesur , ha comenzado su ponencia en el marco del II Encuentro Alimarket Soluciones de Envasado para Gran Consumo con una rápida visión de la compañía: integrado por distintas empresas propiedad de la familia Guillén, actualmente dispone de siete plantas en España, una en Siria y cuatro oficinas comerciales repartidas entre EE.UU., Brasil, China y Reino Unido. Con una facturación superior a los 550 M€ y más de 600 empleados, Acesur tiene presencia en más de 100 países y dispone de un amplio portfolio de marcas . El grupo, ha elaborado un Plan Estratégico para el periodo 2016-2020 basado en tres puntos: eficiencia y productividad, internacionalización e innovación . "Nos encontramos cada vez en un mercado más competitivo, con necesidad continua de aportar valor a nuestros clientes" lo que ha redefinido el papel de nuestros proveedores hacia un modelo más colaborativo.

De todas las instalaciones del grupo, son sus plantas situadas en Vilches (Jaén) y en Dos Hermanas (Sevilla) las que mantienen actividades de envasado. Precisamente en Vilches, la compañía dispone desde 2007 de un proveedor, Logoplaste, en modalidad "in-house" para sus envases de pet. En palabras de Pérez Limón, "Comenzamos ese contrato con 5 referencias, todas de aceite (1, 3 y 5 l) y hemos ido desarrollando formatos y referencias hasta completar 46 en la actualidad entre aceites y salsas. Esto nos ha obligado a un trabajo de planificación y flexibilidad en la organización del envasado (no almacenamos en silos sino que todos los envases son soplados directamente a línea), además de un trabajo de diseño en el que nos involucramos un gran número de departamentos".

De hecho, con la colaboración de Logoplaste se han generado sinergias utilizando preformas de aceite en salsas, optimizando pesos, etc . En este campo, Acesur considera como tendencias el uso de envases coloreados que protegen el contenido, la personalización de los envases y el mayor uso de rPet, así como la reducción de los gramajes. En cambio, en los mercados anglosajones la compañía ha observado que se demanda la sustitución del vidrio por envases "hard pet", más pesados de los habituales.

Precisamente en vidrio las tendencias se dirigen, según Pérez Limón, hacia "la reducción del vidrio blanco por el de colores; la personalización de envases; la optimización de pesos; y las tiradas reducidas". En el campo del etiquetado, Acesur destaca la complejidad que se deriva de la excesiva regulación, que a veces da lugar a una "desinformación" del consumidor, así como su trabajo en cuanto a materiales y tintas. El papel antigrasa, característico de su sector, "no ha evolucionado demasiado" y "alternativas como sleeves o etiquetas plásticas con terminaciones más atractivas, están socavando su uso".

En papel soporte, se ha sustituido el habitual glasiné por pet de 23 micras consiguiendo menor coste, menor peso, más ud por bobina, menor rotura del papel soporte y mayor reciclabilidad. En cuanto a las tintas, Acesur pide a sus proveedores que trabajen con ultravioletas, que presentan mayor resistencia a los roces y tienen menos compuestos volátiles que las solventes, además de permitir aplicaciones, como termocromáticas, irreversibles, olfativas, etc., que es la tendencia hacia la que se dirige la evolución del etiquetado, junto a otras como la incorporación de chips, trazabilidad, etiquetas interactivas y animadas con la revolución de los smartphones.

En relación al embalaje secundario, Acesur ha cambiado el uso de papeles anónimo por litografiados, ya que entiende que "cada vez es mayor su impacto en el lineal, como herramienta de marketing y promocional". Por ello, ha trabajado con sus proveedores en la reducción del gramaje de las cajas, al igual que ha hecho en los productos que envasa en lata.

Otros tipos de envases, como el spray o el brik, no han funcionado en el sector del aceite. La importancia de los tapones también es clave, según Pérez Limón, e incluso "motor de compra", ya que si a la hora de verter el aceite el tapón no funciona correctamente, se pierde la fidelización del cliente.

En este campo, además de trabajar en la reducción de pesos, el objetivo es "obtener mejor funcionalidad en los tapones permitiendo una mejor dosificación y control mediante mecanismos (tapones vertedores) o uso de válvulas de silicona", resalta. Además, el director de compras de Acesur destaca la especial importancia de la ley sobre inviolabilidad e irrellenabilidad de los envases de aceite, aprobada hace dos años, que causó mucha expectación e incertidumbre en el sector.

Una derivada de esa ley ha sido el incremento que ha supuesto el uso del embalaje flexible de un solo uso para aceites en Horeca así como, en menor medida, el cambio de consumo originado por los nuevos hogares (aceites o salsas monodosis para evitar deterioro del producto de más capacidad).

Para concluir, Pérez Limón plantea una reflexión: "en Acesur entendemos que envases que no sean permanentemente reciclables, no tendrán cabida en el futuro", y por ello trabaja para que en 2020 todos sus residuos sean reciclados.