La multinacional francesa Oeneo acaba de dar a conocer sendos estudios relativos a los beneficios que presentan sus tapones tecnológicos 'Diam' en relación a la presencia de SO2 (Dióxido de azufre) en el vino, elemento responsable de realizar funciones microbiológicas en éste pero que, sin embargo, es responsable del dolor de cabeza y el ardor de estómago que provoca, por lo que las tendencias enológicas van hacia la reducción de su utilización.
En este sentido, según indican desde la compañía, estudios realizados por el Australian Wine Research Institute (AWRI), el Institut des Sciences de la Vigne et du Vin (ISVV) y el Institut Francais de la Vigne et du Vin (IFV) han demostrado que los estos tapones preservan mejor el SO2 existente en la botella que los tapones tradicionales, lo que permite considerar una vinificación que utiliza menos SO2 (de 10 a 15 mg/l), ofreciendo una protección similar.
Esto se une a la capacidad de estos corchos para reducir la oxidación del vino, especialmente en los destinados a guarda, preservando su cualidad sensorial global o limitar el TCA en el vino así como las desviaciones organolépticas.
Oeneo está presente en España a través de Diam Corchos, con sede en San Vicente de Alcántara, especializada en la producción de tapones de corcho tecnológicos 'Diam' para vinos tranquilos, además de contar con dos plantas en el mismo complejo dedicadas a la limpieza y tratamiento de corcho granulado con CO2 en estado supercrítico. Todas estas actividades le generaron unos ingresos en el ejercicio 2015-2016 (concluido el pasado 31 de marzo) de 73,5 M€, un 18,8 % más que en el periodo anterior, con 1.545 M ud comercializadas, lo que se consolida como la primera operadora del sector del corcho en España.
