El grupo Berry Global ha anunciado la ampliación de su línea ‘B Circular’ de soluciones de envasado estándar diseñadas para la circularidad con la introducción de una selección de productos para el mercado del cuidado del hogar. En total se ofrece un nuevo catálogo con 35 artículos disponibles que abarcan desde cierres con pulverizador, rosca, a prueba de niños y abatibles, hasta tarros, además de productos especializados como boquillas enroscables o aplicadores de pincel. Ahora pueden fabricarse con plástico PCR en cantidades que oscilan entre el 30% y el 100%, mientras que muchos se han diseñado para mejorar su reciclabilidad, por ejemplo mediante el desarrollo de pulverizadores de gatillo totalmente de plástico que no contienen piezas metálicas.

Algunos de los envases de la línea fabricados con PP también pueden solicitarse con ‘ CleanStream ’ , un plástico recuperado localmente en Reino Unido y reciclado mecánicamente con la tecnología de Berry, que es apto para aplicaciones sensibles al contacto. Además, la expansión de la línea ‘B Circular’ al ámbito del hogar, junto con los productos ya disponibles para aplicaciones de cuidado personal, abre nuevas oportunidades para las marcas que operan en ambos mercados.

“Un informe de Euromonitor del año pasado destacaba que el 71% de las marcas tenían la intención de utilizar sus “envases sostenibles” como argumento de venta en sus lanzamientos de nuevos productos*, y esta es una tendencia que creemos que se prolongará durante 2025 y en años futuros”, afirma Sarah De La Mare, directora de Línea de Producto - Cierres y Gatillos de Berry Global CPI.

“Nuestras soluciones de envasado ‘B Circular’ ayudan a las marcas a ofrecer esos envases más sostenibles que demanda actualmente la mayoría de los consumidores sin que esto suponga hacer concesiones a nivel de rendimiento, estética o funcionalidad”.

La línea B Circular combina los conocimientos de diseño e ingeniería de Berry con la escala mundial de la empresa, que le da acceso a suministros regulares y fiables de resinas circulares de alta calidad. Todos los productos se diseñan conforme a dos principios fundamentales de la economía circular: eliminar residuos y contaminación del proceso y mantener el producto y los materiales en uso. Además del uso de PCR y de un mejor diseño de la reciclabilidad, que se ajusta a las directrices de RecyClass y de la Asociación de Recicladores de Plástico, esto incluye también el desarrollo de envases reutilizables y rellenables, tecnologías de aligeramiento del peso y el uso de recursos renovables (como residuos forestales o aceites de cocina usados) para sustituir las materias primas procedentes de combustibles fósiles.

“Con la ampliación de esta línea, ayudamos a más empresas, tanto grandes como pequeñas, a cumplir sus compromisos de sostenibilidad y a llevar más rápidamente al mercado soluciones que contribuyan a una economía circular”, concluyó Sarah De La Mare.