El fabricante de líneas de envasado Ulma Packaging, de Oñati (Guipúzcoa), ha desarrollado un proyecto para el británico Border Biscuits, el cual tenía como objetivo duplicar la producción de uno de sus principales productos tras acometer una inversión en su centro de producción de Lanarkshire. El reconocido fabricante de galletas, que produce más de 300.000 paquetes de galletas a la semana, ha invertido en el sistema de distribución, envasado, y encajado de Ulma para satisfacer la demanda de su popular gama de productos surtidos mixtos para mayoristas y profesionales de la restauración.
Border Biscuits instaló una línea de envasado que incluye dos envasadoras flow pack ‘Atlanta Hi-Tech’ con alimentadores ‘Dakota’, donde los productos se apilan una encima de la otra para lograr paquetes individuales a velocidades de hasta 150 ud./min. Después del proceso de envasado, la instalación de Ulma también es responsable de toda la gestión automática de cajas. Dicha parte de la instalación consta de dos formadoras de cajas de cartón, envío a la zona de encajado, encajado del producto envasado y el cerrado final de las cajas mediante dos cerradoras.
La línea de encajado, que está formada por sistemas de apertura y carga dobles, cuenta con precisión la cantidad correcta de paquetes requeridos para cada caso, adaptándose de manera automática a los diferentes formatos de cajas existentes. Es un sistema flexible que se adecua a los diferentes formatos con los que el cliente trabaja.
El sistema totalmente automatizado instalado por Ulma reemplaza el proceso de envasado de carga semi-manual de Border Biscuits, consiguiendo duplicar la producción de su gama de productos de marca propia más vendidos destinados a clientes de restauración.Toda la instalación está diseñada para que el proceso sea completamente continuo, en el que la parada de una línea no afecta al proceso de fabricación de galletas. La instalación consta de buffer y control de velocidades para que no se vea afectada la producción. La gestión de la producción se controla y se monitoriza desde un sistema centralizado propio de Ulma.