En medio de su refundación, sin fecha fijada, la cadena hotelera pública de la Diputación de Cádiz, Tugasa, ha acometido varias reformas en algunos de sus activos. Los hoteles que ya han sido sometidos a un proceso de modernización han sido el 'Arco de la Villa' (2E-17), el 'Villa de Algar' (2E-20), EL 'Medina Sidonia' (3E-17) y el 'Las Truchas' (2E-28). Los próximos en hacerlo serán 'La Posada' (2E-7), la 'Hospería Convento de San Francisco' (3E-25), el 'Sierra y Cal' (2E-34), el 'Castillo de Castellar' (3E-9) y el 'Almendral' (2E-28). La inversión destinada a esta tarea es de 1'6 M€ tanto para mobiliario y decoración como para la implantación de nuevas tecnologías.
Tras muchas idas y venidas, el futuro próximo de la nueva Tugasa, que surgirá de la extinción de la antigua Tugasa, creada en 1970, está garantizado. No obstante, está afrontando otros cambios que van desde un rediseño de la imagen de la marca hasta la negociación de contratos de cesión. El proceso que desembocará en la liquidación de la mercantil tras la hotelera Turismo Gaditano S.A. arrancó en 2015 a propuesta del consejo de administración y ante los graves problemas económicos que la acuciaban. Tras esta decisión la forma jurídica que adquirirá la nueva cadena será la de entidad pública empresarial. Así se acordó a finales de junio en el Pleno de la Diputación de Cádiz, donde quedó aprobado que la entrada en funcionamiento de la nueva Tugasa se hará efectiva cuando se concrete la liquidación del actual red empresarial, se garantice su dotación presupuestaria, se complete la transferencia de recursos y equipamientos, así como el nombramiento y la toma de posesión de los órganos de gestión y dirección.
Antes, en abril, ya se decidió mantener el nombre de la cadena debido a su reconocimiento entre los potenciales clientes. Entonces también se firmó mantener la red de alojamientos, compuesta por nueve unidades, y los puestos de trabajo, así como comenzar a negociar la cesión por 30 años y con carácter gratuito de los cuatro establecimientos que que faltaban por ser cedidos o que no pertenecían a la propia Tugasa. Estas cesiones tendrían que aprobarlas los respectivos ayuntamientos propietarios de los inmuebles. En concreto, los de Castellar, Vejer de la Frontera, Setenil de las Bodegas y Algar. Las negociaciones siguen abiertas.