El número de proyectos geriátricos activos en nuestro país no deja de descender. Si hace seis años se contabilizaban hasta 720 nuevas iniciativas, en la actualidad, tan solo existen planes para levantar algo menos de 270 nuevos centros. La crisis generalizada y un parque geriátrico, en muchas ocasiones, desocupado estarían detrás de la paralización de buena parte de los proyectos que habían ido surgiendo en ejercicios anteriores. La formulación de iniciativas, aunque de menor envergadura, deja lugar para la esperanza de un sector, en cuyo futuro confían los verdaderos especialistas.
Los datos recogidos por SANImarket arrojan un descenso significativo del número de proyectos geriátricos, cuyo futuro no se cuestiona en la actualidad. Así, tan solo estarían activas un total de 265 iniciativas, que incorporarán al parque geriátrico español 24.189 nuevas camas. Esta cifra es inferior a la registrada a estas alturas del pasado ejercicio (352 proyectos y 32.000 camas nuevas), pero, sobre todo, supone tan solo el 31,4% de las camas que esperaba implementar el sector hace seis años.
Así, si bien es cierto que el número de camas operativas se ha elevado de manera importante en estos seis últimos ejercicios (contamos ya con 354.722 camas), el sector afronta con pies de plomo su futuro inmediato. La falta de financiación, de concertación de plazas y, en algunos casos, de interés por parte de los inversores conlleva que tan solo los verdaderos especialistas sigan apostando por su desarrollo.
Como consecuencia de todo ello, los expertos coinciden en señalar que los proyectos que ahora se contemplan son más firmes que los que se anunciaban en época de bonanza, cuando casi cualquier inversor se apuntaba al carro geriátrico, en muchas ocasiones, con total desconocimiento del sector. Además, ahora se tienen más en cuenta aspectos como los compromisos públicos de concertación, tremendamente limitados en los últimos años, y que están provocando que sigan sin abrirse centros ya construidos e, incluso, equipados.
En esta coyuntura, deja también lugar para la esperanza la reactivación de proyectos antiguos, así como la formulación de nuevas iniciativas, aunque, en muchos casos, se trata de planes con dimensiones más reducidas. De esta nueva tendencia son en buena parte responsables las Administraciones Públicas, titulares en la actualidad de cerca del 55% de los proyectos activos, por delante de los inversores privados (algo más del 19%), el Tercer Sector, en el que se aglutinan las entidades sin ánimo de lucro y que concentran el 12,8%, y las concesiones administrativas de obra y explotación (13,2%).