Presencia continua del personal de enfermería
Para atender las necesidades sociosanitarias de esta población, en los centros residenciales se cuenta con un amplio tipo de profesionales como son los médicos, enfermeros, trabajadores sociales, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas, auxiliares de enfermería, psicólogos y gerocultores. Parte de este personal tiene turnos para cubrir las 24 horas del día los 7 de la semana, como son los auxiliares de enfermería, gerocultores y enfermeras, no siendo común el servicio de médico durante las 24 horas. Es decir, gran parte de la asistencia sanitaria en estos centros es llevada a cabo por enfermeras y auxiliares de enfermería (TCAE).
La enfermera Lola Montalvo define en su blog la situación en los centros residenciales y las labores de las enfermeras en dichos centros, indicando que “una vez que los residentes ingresan en un centro residencial, viven de forma permanente en dichas instalaciones, y eso permitirá al personal de enfermería conocer bien a las personas con las que van a trabajar a diario”. El trabajo que realiza el colectivo enfermero no se lleva a cabo en las plantas (como en el caso de los hospitales), sino que se realiza desde la Unidad de Enfermería (con o sin médico) y tiene una serie de cometidos pricipales.
Así, el colectivo se encarga de la valoración al ingreso de los residentes. Esta quizás se trate de la labor más importante, porque de esta valoración dependerá la adaptación al medio residencial y las ayudas que precisará el residente. La valoración de enfermería se unirá a las del resto de profesionales para obtener un Programa Individualizado de Atención (PIA).
Tras esa valoración inicial se establecen los planes de cuidados que va a precisar cada residente, organizándose en varios protocolos. Así, en cuanto a necesidades básicas, se estructuran las características en materia de movilidad, incontinencia-eliminación, prevención de UPP, vigilia-sueño, nutrición e higiene. Igualmente, en cuanto a patologías, se cuenta con el protocolo correspondiente en base al diagnóstico de patologías crónicas o de prevención de riesgos detectados (obesidad, HTA, diabetes, etc.).