Antes de nada, empecemos definiendo que se entiende por telemedicina. Tradicionalmente, la telemedicina era la prestación de servicios médicos a distancia, pero como todo en esta vida, el concepto ha evolucionado a una definición mucho mas amplia y con más actores en su interpretación. Por tanto, podríamos definir telemedicina como el conjunto de actos sanitarios que incluyen tanto la prevención, el diagnóstico, el tratamiento, la rehabilitación y la educación sanitaria en aras de maximizar los esfuerzos y los recursos que los sistemas sanitarios, ya sean públicos o privados, ponen a disposición de sus “clientes”, y que dichos actos son articulados por medios tecnológicos que implican la no concurrencia en un mismo sitio de los recursos implicados.
Este concepto de telemedicina, tiene otras connotaciones, especialmente sociales, ya que es un medio que posibilita la ubicuidad de la atención sanitaria a prácticamente todos las zonas geográficas, es decir, puede servir para vertebrar realmente el estado; es un medio que, aunque pueda tener una fuerte inversión inicial, su curva de retorno económico es muy rápida si se han definidos bien los objetivos que se pretenden alcanzar; facilita la continuidad asistencial en la vida de los pacientes, ya que la comunicación medico primaria con medico especializada puede ser establecida por protocolos de comunicación en aras de una atención mas personalizada; la formación continua de todo el sistema es favorecida por este tipo de tecnologías, tanto a nivel de médicos de distintos niveles asistenciales, como médicos de las mismas especialidades; y se fomenta el intercambio de conocimiento especialmente con alumnos de las distintas áreas de conocimiento sanitario.
Todo esto disminuye el tiempo entre la toma de exámenes y la obtención de resultados, o entre la atención y el diagnóstico del especialista, el cual no debe viajar o el paciente no tiene que ir a examinarse, reduciendo costos de tiempo y dinero. Cabe recordar que para que este ecosistema funcione, la inversión, especialmente en redes de alta velocidad que cohesionan el territorio, es básica y, dependiendo del tipo de telemedicina que queramos hacer, los elementos hardware que se utilicen tendrán a su vez un coste variable.