Teniendo en cuenta solo los hospitales monográficos que el Ministerio de Sanidad en su catálogo de centros categoriza como larga estancia/geriatría, existen actualmente en España unas 13.916 camas, repartidas en un centenar de centros, destinados íntegramente a hospitalizaciones prolongadas de crónicos . En estos volúmenes no se están incluyendo las camas que los pacientes crónicos puedan estar ocupando en otros centros hospitalarios de tinte generalista o multidisciplinar, ni las concertadas por algunas administraciones en otros recursos sociales como las residencias de mayores, por ejemplo (sí estarían las que Sanidad concierta en hospitales sociosanitarios de titularidad privada). De los cuadros reflejados en el Informe 2016 de hospitales crónicos en España, que recientemente ha publicado la revista económica Alimarket Sanidad y Dependencia , se desprende que el 50% del total nacional de camas de larga estancia se sitúa en Cataluña, de las que algo menos de la mitad son de uso público –el Servei Catalá de Salut gestiona directa o indirectamente un total de 3.059 camas de larga estancia-. Del total nacional (13.916 camas), apenas un 47% son atribuidas al sector público, dejando amplio espacio para el sector privado y para la colaboración público-privada (entendiendo al Tercer Sector como un actor privado aunque muy dependiente de la concertación). En este apartado, cabe destacar, por ejemplo, a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios que pese a tener catalogados solo seis centros como monográficos en la atención de crónicos, cuenta actualmente con un total de 1.750 camas y plazas repartidas en 16 centros hospitalarios para enfermos crónicos, distribuidos en todo el territorio español, sin incluir sus centros de salud mental en donde se atiende a las personas con enfermedad mental crónica. En el caso de las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús , muchos de sus centros (una quincena de hospitales generales y de salud mental y nueve geriátricos) incluirían unidades para atención de crónicos.
Por detrás de la administración sanitaria catalana, que lidera el ranking de operadores sociosanitarios por volumen de camas, con una cuota de casi el 22%, se ha colocado en pocos años el grupo privado Hestia Alliance , de origen catalán, con un 10,79% del total de camas en ocho centros sociosanitarios (seis de ellos en Cataluña). Hestia acaba además de entrar en la Comunidad de Madrid con la adquisición de Clínica Sear, concertada casi en su totalidad con el Servicio Madrileño de Salud para enfermos de larga estancia (cuidados paliativos y prolongados), y el psiquiátrico Sanatorio Esquerdo a finales de 2015.
Otras compañías como Casaverde e ICOT han apostado por la compra de infraestructuras geriátrias para adaptar su enfoque hacia la atención neorológica (Casaverde) o larga estancia (grupo ICOT).
