El sector de clínicas dentales ha sufrido especialmente el impacto de la pandemia, primero a causa del estado de alarma, que motivó que, aunque inicialmente fueron consideradas servicios esenciales, finalmente se les permitiera sólo atender casos de urgencia, mientras que, posteriormente, se han visto afectadas por cierres de centros ante el efecto de las pérdidas económicas como consecuencia de los meses en que estuvieron cerradas, así como otras medidas como los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE). Sin embargo, el efecto no ha sido igual en todas las cadenas.
El caso más paradigmático ha sido el de la red de centros odontológicos Dentix. Solo unos días después de la declaración del estado de alarma, fue una de las primeras empresas del sector sanitario en declarar un ERTE el pasado 18 de marzo. Asimismo, a principios de abril entró en situación preconcursal, una figura a la que se acogió el grupo para ganar tiempo y como "una forma de proteger a la compañía". En ese momento, Dentix anunció que estaba buscando nuevos socios industriales, intentando renegociar su deuda con las entidades financieras y valorando la venta de sus delegaciones en el extranjero a otras cadenas dentales y fondos de inversión. Efectivamente, a mediados de abril el fondo de capital riesgo Evolvere Capital adquirió sus delegaciones de Chile y Colombia sin contraprestación económica y el grupo tiene previsto hacer lo mismo con las delegaciones de México e Italia. Precisamente, Colombia, Italia y México son los tres países (al margen de España) donde contaba con un mayor número de centros, cerca de 50 en cada uno de ellos.
No obstante, el pasado cinco de octubre, Dentix presentó concurso voluntario de acreedores para no "perjudicar posibles inversiones que puedan adoptarse a corto plazo por terceros y que puedan dar viabilidad a la compañía", de acuerdo con un comunicado de la empresa, en el que también hacía hincapié en el "impacto devastador" sufrido por la compañía tras decidir a principios de año la firma de inversión global KKR, su principal acreedor, no convertirse en su accionista mayoritario a cambio del canje de su deuda, estimada en 160 M€, incumpliendo así "sus obligaciones contractuales de inversión en el grupo, abandonando a la compañía, sus trabajadores, acreedores y pacientes". Ya en noviembre, el día 13 optó por cerrar las 180 clínicas propias que conservaba en nuestro país. Asimismo, desde esa fecha el 100% de sus 2.600 trabajadores fueron incluidos en el ERTE por fuerza mayor, del que una parte de la plantilla había salido tras la reapertura de centros al acabar el confinamiento. Solo unos días antes, se conoció que Advent, socio mayoritario de Vitaldent, había decidido abandonar la puja por hacerse con Dentix.
Se da la circunstancia de que ayer, 25 de noviembre, se conoció que el Juzgado de lo Mercantil Nº2 de Madrid declaraba el concurso de acreedores voluntario del Grupo Dentix y subrayaba en su auto que "de la documentación aportada, apreciada en su conjunto, se desprende el estado de insolvencia" de Dentix, según publica la Agencia EFE. El juez ha nombrado a Deloitte como administrador concursal y a Account Control-Ius+Aequitas como auxiliar delegado. Deloitte deberá encargarse ahora de informar a cada uno de los acreedores de la declaración del concurso.
Por su parte, tal y como ha podido conocer Alimarket Sanidad y Dependencia, el grupo de odontología y estética Vivanta habría anunciado ya a los trabajadores su intención de iniciar un proceso de despido colectivo. A falta de que se desarrolle la negociación entre la empresa y los representantes de los trabajadores, de momento se desconoce el número de trabajadores a los que afectaría la medida, así como el motivo esgrimido para su planteamiento, si bien, todo hace indicar que el descenso en la demanda de servicios estaría detrás de la decisión.
Como se recordará, Vivanta empezó a partir de finales de mayo la reapertura escalonada de su red de centros, cuya actividad se vio obligada a paralizar prácticamente durante los peores meses de la pandemia. En concreto, el grupo dejó activas tan solo 26 de las 240 clínicas de las que dispone en nuestro país. La vuelta a la actividad supuso también la reincoporación de buena parte de los trabajadores que hasta el momento se encontraban en situación de ERTE.
Entremedias, Vivanta registraba un cambio en su dirección, ya que el que era su CEO, Juan Olave, se incorporaba en septiembre de 2020 también como CEO a Drake Food Service, división de restauración del Grupo Drake. Cinco meses antes, Portobello, propietario de Vivanta, reforzaba el consejo de administración del grupo con el nombramiento de tres nuevos profesionales con experiencia en la gestión y dirección de empresas, como son Javier Gimeno, Rafael Herrero y Francisco Gimena.
Cadenas que han ampliado sus redes
En cambio, otros grupos han seguido apostando por las aperturas. Es el caso de Vitaldent, que ha inaugurado este año cuatro clínicas en Madrid, Palma de Mallorca, Plasencia (Cáceres) y Huelva. Además, el pasado mes de octubre adquirió una participación mayoritaria en la empresa Moonz, especializada en ortodoncia infantil. Con esta operación, los cinco centros de Moonz y su plantilla de 50 personas se integraron en Vitaldent.
De la misma forma, la empresa Smile2Impress, especializada en ortodoncia invisible, ha abierto en septiembre y noviembre dos centros propios 'Impress' en Madrid y Valencia, respectivamente, que se sumaban al establecimiento barcelonés con el que se fundó la compañía en 2019. Antes de que acabe 2020 estrenará otros centros en Palma de Mallorca y Sevilla y a comienzos de 2021 hará lo propio con una clínica en Bilbao. Al margen de estas clínicas, Impress dispone de espacios propios en más de 30 centros por toda España. Además, tiene presencia en Portugal e Italia, en los que desembarcó en este ejercicio. Asimismo, en octubre, la compañía culminó una ronda "seed" de financiación de 5 M€, en la que participaron los fondos de inversión TA Ventures, Bynd VC y Sabadell VC, junto a otros "Business Angels" europeos.
A su vez, Asisa Dental, filial del grupo Asisa para el ámbito odontológico, también ha incorporado a principios de noviembre una clínica propia en Torrevieja (Alicante), poco después de haber inaugurado su segundo centro 'True Smile Works' en los Emiratos Árabes Unidos. Previamente, a comienzos de año puso en marcha tres establecimientos en Zaragoza, Sevilla y El Ejido (Almería), a los que se añadieron otros dos en Murcia y Valencia en julio y octubre, respectivamente.
El último ejemplo ha sido el de la división del grupo asegurador IMQ para su actividad sanitaria, que abrió hace dos semanas su séptima clínica dental, situada en el centro de Bilbao (Vizcaya).