La Comunidad de Madrid ha fijado la apertura de la residencia pública de Vista Alegre, en la capital, para principios del próximo febrero, una vez se rematen las obras de adaptación aplicadas en el edificio. Las reformas han consistido en la adaptación de las puertas y baños de todas las habitaciones para hacerlos accesibles a sillas de ruedas y grúas geriátricas, además de incorporar un sistema digital de llamadas. Equipada con 126 plazas para dependientes, la residencia de Vista Alegre es uno de los ocho centros que el ejecutivo madrileño ha reformado para adaptarlos a las personas que se encuentran en situación de dependencia, tras una inversión total de más de 34 M€ en los últimos dos años, afectando a un total de 946 plazas. De esel presupuesto, más de 27,5 M se destinó a la adaptación de plazas y el resto se invirtió en la modernización de áreas comunes, eliminación de barreras arquitectónicas y dotación de nuevos equipamientos. Se ha incorporado además en todos los centros nuevos equipamientos médicos (desfibriladores automatizados y equipamientos de reanimación cardiaca, entre otros) y de rehabilitación (pasarelas, barras, ruedas para la articulación de los brazos, bicicletas, así como diversos elementos para mejorar o mantener la movilidad física de los usuarios).