La Clínica Universidad de Navarra ha adquirido nuevos equipos para el diagnóstico de patologías mamarias para sus dos sedes de Pamplona y Madrid. De esta forma, incorpora un novedoso mamógrafo y reemplaza los ecógrafos por una versión más moderna, con una inversión próxima a los 400.000 €. Mínima agresión, máxima precisión y menor tiempo son las bases de este equipamiento tecnológico.
En su sede de Pamplona ha instalado un nuevo mamógrafo que no sólo mejora la calidad de imagen sino que permite la optimización de más procedimientos. Un perfeccionamiento en la precisión del diagnóstico acompañada de tres aportaciones más: la realización de tomosíntesis, nuevas posibilidades técnicas para hacer mamografías con contraste yodado y un equipo de estereotaxia. Como complemento a la mamografía, la tomosíntesis permite componer mediante planos una mama en tres dimensiones, lo que ofrece mayor precisión que la imagen convencional.
Además, gracias a la mamografía con contraste yodado se va a obtener una mayor sensibilidad en el estudio mamográfico. Pese a que de forma rutinaria no está recomendada para todos los casos, en ocasiones, es necesaria para completar la fiabilidad de un diagnóstico. Esta prueba facilita la localización de la lesión, ya que el contraste se extravasa en ese punto.
Por último, este nuevo mamógrafo, modelo ‘Mammomat Revelation’, de Siemens Healthineers, incorpora un equipo de estereotaxia, un aparato que permite dirigir una aguja de biopsia a la lesión problemática. Una prueba que con el nuevo equipo puede guiarse también mediante los planos obtenidos por la tomosíntesis. De este modo, el diagnóstico ya no queda supeditado a que la lesión sea visible en la imagen convencional.
La Clínica Universidad de Navarra también ha renovado sus ecógrafos con la última versión del ‘Logiq E9 XDClear’ de GE Healthcare para sus dos sedes. Este nuevo modelo incorpora nuevas mejoras que permiten diferenciar con claridad pequeños detalles, enfocar con alta fidelidad y ofrece más información. Tres avances conseguidos gracias a la obtención de mejor y mayor contraste y resolución.
Estos adelantos, beneficiosos para todas las especialidades, vienen acompañados de una apuesta más específica para patología mamaria. En concreto, incorpora dos herramientas para perfeccionar el informe de las lesiones. Por un lado, proporciona una valoración no invasiva de firmeza de la lesión gracias a una elastografía 2D de shear wave (onda de corte).
Por otro, mediante una navegación volumétrica consigue fusionar, en tiempo real, las imágenes de una ecografía con las obtenidas de una resonancia magnética o del PET (Tomografía por Emisión de Positrones).