El Gobierno balear ha aprobado el proyecto ejecutivo previo a la próxima licitación de obras de la residencia Son Dureta de Mallorca. Según las primeras estimaciones, el presupuesto alcanzará los 9,3 M,€ para una residencia con 120 camas, que se organizará en seis módulos de convivencia autónomos, aunque compartiendo zonas comunes y un espacio central de integración con el bosque de Bellver. El Gobierno ha solicitado financiación de los fondos europeos, si bien se ha comprometido a asumir directamente el coste de las obras si le fueran denegados los fondos para este proyecto.
El proyecto residencial de la residencia Son Dureta forma parte del Plan de Infraestructuras 2017-2021 aprobado en 2017 por el Gobierno balear para el desarrollo de nuevas plazas geriátricas. Con una dotación de 35,8 M€, el plan incluía la construcción de nuevas residencias en Palma (Centro Son Martorell), Marratxí (actualmente en construcción), Formentera y Maó (Menorca), esta última actualmente en fase de licitación de obras.
Según el proyecto dado a conocer en febrero de 2017, la residencia de dependientes se ubicará en un inmueble de nueva construcción de 8.000 m2, dentro del Complejo. Además de sus 120 camas para usuarios dependientes, el proyecto inicial incluía un centro ocupacional para personas con diagnóstico de salud mental, dotado de otras 20 plazas, así como servicio de valoración de personas con discapacidad y espacios para equipos de valoración de dependencia.
El proyecto de construcción de un nuevo complejo sociosanitario en las instalaciones del antiguo hospital Son Dureta se dio a conocer también en 201 8. En 2020 finalizó la demolición de parte de los edificios, según lo previsto, y la Consejería de Salud preveía sacar a licitación las obras en los primeros meses de 2021, con intención de iniciar las obras del hospital, especializado en enfermos crónicos, antes de finalizar 2021. El nuevo Son Dureta dispondrá en total de 540 camas en dos bloques, y tiene un presupuesto estimado de 135 M€ para la ejecución del complejo en dos fases.
También en Baleares, recientemente se han iniciado las obras de la segunda fase de consolidación y rehabilitación del Hospital sociosanitario Verge del Toro (la primera fase de adecuación de fachada y estructuras culminó el pasado diciembre), que supondrán finalmente una inversión de 15 M€, para llevar a cabo las reformas interiores contempladas en el plan de usos del centro. Según lo previsto, el hospital Verge del Toro contará con 5.101 m2 de instalaciones, con 60 habitaciones, que alojarán entre 60 y 90 personas, con una previsión de que preste atención a 360 usuarios anualmente.
Por otra parte, el gobierno insular continúa las obras de ampliación de la UCI y el servicio de urgencias y la construcción de un nuevo edificio de rehabilitación en el Hospital de Inca (Mallorca). El proyecto, aprobado el pasado febrero, tiene un presupuesto de 8 M€, que incluye cuatro nuevas camas de UCE y ampliar las urgencias hasta las 39 camas, incorporando seis butacas y otras seis unidades de corta estancia. El nuevo edificio de rehabilitación dispondrá de 590 m2 para todas sus actividades.
Por último, también se han realizado inversiones recientes en el Hospital Mateu Orfila, de Maó, que ha incorporado un TAC de última generación, con 1 M€ de inversión, que dispone de 80 lectores y 160 cortes y reduce en un 80% la dosis de radiación. Asimismo, el hospital está destinando 1,9 M a la cubierta del aparcamiento.