Con la vuelta a la normalidad tras la pandemia, los servicios de atención sanitaria y sociosanitaria en el hogar tienen menos protagonismo, pero tras demostrar su eficacia en la crisis, la tecnología cada vez está más presente en estos ámbitos. Así, herramientas como la inteligencia artificial (IA), la realidad aumentada y virtual, los asistentes de voz y chatbots acercan estos servicios al usuario y facilitan el trabajo de los profesionales, como explica el Informe 2024 de Proveedores de Telemedicina, Teleasistencia y Ayuda a Domicilio en España, publicado por Alimarket Sanidad y Dependencia.
Gracias a un amplio abanico de soluciones, de empresas como Legrand Care, Doole Health, Atlinks, EAIP Innova, Essence SmartCare, Tunstall Televida, NTT Data, Telefónica o Nébula Project, entre otras, el usuario puede ser monitorizado a distancia y el personal médico o sociosanitario puede detectar posibles cambios que pongan en riesgo su salud (por ejemplo, caídas, cambios en el ritmo cardíaco, etc.).
Asimismo, la tecnología permite la teleconsulta y el diagnóstico remoto, pero siempre como complemento de la atención presencial y no para sustituirla. Además, contribuye a reducir la carga asistencial en los centros sanitarios, evitando visitas y desplazamientos innecesarios.
No obstante, a pesar del avance logrado por estos servicios, todavía subsisten dificultades para su completa implantación, como las barreras que todavía existen entre la población de mayor edad frente a la tecnología o los problemas para el mantenimiento de la seguridad y protección de datos.