El mercado sin lactosa, en ebullición
Por su parte, el segmento sin lactosa también crece de una manera significativa. La ausencia de una normativa específica que establezca los niveles de lactosa que debe contener un alimento para declararlo como "bajo en lactosa" o "muy bajo en lactosa" conduce a que la industria se incline por la fabricación de productos directamente "sin Lactosa", normalmente más caros, a pesar de que en la gran mayoría de los casos de alergia existe un umbral de tolerancia. Hasta ahora, según apunta el 'Libro Blanco de la Alimentación', la lactosa está presente en algunos alimentos que, a priori, no tendrían por qué contenerla, como por ejemplo ciertos embutidos, fiambres, conservas o sopas, lo que dificulta la elección de alimentos por parte de los pacientes. Por ello, está siendo precisamente la industria cárnica una de las mas sensibles a este tema, con lanzamientos continuos que ya especifican la ausencia de lactosa. Y es que, además, al ser una patología con prevalencia elevada, el porcentaje de potenciales consumidores es alto, lo que ha conllevado la implicación de los fabricantes.
Por su parte, el segmento sin lactosa también crece de una manera significativa. La ausencia de una normativa específica que establezca los niveles de lactosa que debe contener un alimento para declararlo como "bajo en lactosa" o "muy bajo en lactosa" conduce a que la industria se incline por la fabricación de productos directamente "sin Lactosa", normalmente más caros, a pesar de que en la gran mayoría de los casos de alergia existe un umbral de tolerancia. Hasta ahora, según apunta el 'Libro Blanco de la Alimentación', la lactosa está presente en algunos alimentos que, a priori, no tendrían por qué contenerla, como por ejemplo ciertos embutidos, fiambres, conservas o sopas, lo que dificulta la elección de alimentos por parte de los pacientes. Por ello, está siendo precisamente la industria cárnica una de las mas sensibles a este tema, con lanzamientos continuos que ya especifican la ausencia de lactosa. Y es que, además, al ser una patología con prevalencia elevada, el porcentaje de potenciales consumidores es alto, lo que ha conllevado la implicación de los fabricantes.
Evidentemente, los principales receptores de la mayor parte de las inversiones y lanzamientos se están dando en lácteos (su exclusión por parte de las personas alérgicas conlleva un riesgo de déficit nutricional, fundamentalmente de calcio y vitamina D). En leche, el segmento baja o sin lactosa continúa su crecimiento, si bien todavía únicamente representa el 5,9% (4,0% en volumen) del total de la categoría. Este tipo de leche registró unas ventas en distribución moderna de 124,09 M y 111,2 Ml, un 37,8% y 39,9% más, respectivamente, que el periodo anterior (52 semanas finalizadas el 23 de febrero de 2014). Por contra, las bebidas vegetales, con las que compite, experimentaron cierta desaceleración, sobre todo por la pérdida de fuelle de las de soja, que representan entre el 77% y 83% de esta subcategoría y que cayeron un 3,3% en valor y un 2,6% en volumen (111 M€ y 97,3 Ml). En leche baja y sin lactosa, la MDD ha afianzado su dominio, hasta aglutinar el 58,5% del volumen. 'Kaiku', 'Pascual' y 'Lactalis' marcan el ritmo en el segmento marquista, con una participación en volumen de alrededor del 10% cada una. Por su parte, la categoría de soja está menos repartida, con MDD y Pascual controlando cerca del 70% del mercado.
Evidentemente, los principales receptores de la mayor parte de las inversiones y lanzamientos se están dando en lácteos (su exclusión por parte de las personas alérgicas conlleva un riesgo de déficit nutricional, fundamentalmente de calcio y vitamina D). En leche, el segmento baja o sin lactosa continúa su crecimiento, si bien todavía únicamente representa el 5,9% (4,0% en volumen) del total de la categoría. Este tipo de leche registró unas ventas en distribución moderna de 124,09 M y 111,2 Ml, un 37,8% y 39,9% más, respectivamente, que el periodo anterior (52 semanas finalizadas el 23 de febrero de 2014). Por contra, las bebidas vegetales, con las que compite, experimentaron cierta desaceleración, sobre todo por la pérdida de fuelle de las de soja, que representan entre el 77% y 83% de esta subcategoría y que cayeron un 3,3% en valor y un 2,6% en volumen (111 M€ y 97,3 Ml). En leche baja y sin lactosa, la MDD ha afianzado su dominio, hasta aglutinar el 58,5% del volumen. 'Kaiku', 'Pascual' y 'Lactalis' marcan el ritmo en el segmento marquista, con una participación en volumen de alrededor del 10% cada una. Por su parte, la categoría de soja está menos repartida, con MDD y Pascual controlando cerca del 70% del mercado.
Dentro de este tipo de intolerancia, la categoría más desarrollada por número de referencias es la de yogures, si bien éstos pese a tener un nivel de lactosa similar o incluso superior al de la leche, es bien tolerado por la mayoría de pacientes gracias a la presencia de lactasa derivada de los fermentos utilizados en su fabricación, explican los especialistas. En este capítulo, el segmento "sin lactosa" es poco represetativo, aglutinando el 0,2% del mercado total de yogures en volumen (1.710 t) y el 0,3% en valor (5,6 M€). No obstante, está ganando terreno rápidamente al segmento "100% vegetal", que tiene un peso de 9.672 t y 30,5 M€, pero que en el último periodo auditado por Iri caía un 12,6% en volumen y un 13,4% en valor. En este contexto, el pasado año Corporación Alimentaria Peñasanta (Capsa) desembarcó en yogures sin lactosa con su marca 'Larsa'. Concretamente, presentó dos referencias (natural azucarado y fresa), además de un queso, que vienen a unirse a la leche sin lactosa que la compañía lanzó en julio de 2012, en este caso con su buque insignia 'Central Lechera Asturiana'.
Dentro de este tipo de intolerancia, la categoría más desarrollada por número de referencias es la de yogures, si bien éstos pese a tener un nivel de lactosa similar o incluso superior al de la leche, es bien tolerado por la mayoría de pacientes gracias a la presencia de lactasa derivada de los fermentos utilizados en su fabricación, explican los especialistas. En este capítulo, el segmento "sin lactosa" es poco represetativo, aglutinando el 0,2% del mercado total de yogures en volumen (1.710 t) y el 0,3% en valor (5,6 M€). No obstante, está ganando terreno rápidamente al segmento "100% vegetal", que tiene un peso de 9.672 t y 30,5 M€, pero que en el último periodo auditado por Iri caía un 12,6% en volumen y un 13,4% en valor. En este contexto, el pasado año Corporación Alimentaria Peñasanta (Capsa) desembarcó en yogures sin lactosa con su marca 'Larsa'. Concretamente, presentó dos referencias (natural azucarado y fresa), además de un queso, que vienen a unirse a la leche sin lactosa que la compañía lanzó en julio de 2012, en este caso con su buque insignia 'Central Lechera Asturiana'.
En "100% vegetal", la más dinámica está siendo Triballat España y su marca 'Sojasun', gama que continúa su expansión y que según Iri aglutina actualmente el 10% de las ventas de esta categoría. Recientemente amplió esta línea de productos con una gama denominada "Cremoso", integrada por tres variedades en formato 2x100 g (natural con capa de frutas de frambuesa, de albaricoque y con un toque de azúcar). Previamente, había lanzado una gama de ocho referencias en formato 2x100 g, para "adaptarse al modelo de compra en supermercados, con menor valor facial". Igualmente, presentó 'Sojasun Natural Azucarado' (4x125 g), 'Sojasun' con frutas Mango y Melocotón en trozos (4x125 g) y flan de vainilla (producto 100% vegetal dirigido al target infantil).
En "100% vegetal", la más dinámica está siendo Triballat España y su marca 'Sojasun', gama que continúa su expansión y que según Iri aglutina actualmente el 10% de las ventas de esta categoría. Recientemente amplió esta línea de productos con una gama denominada "Cremoso", integrada por tres variedades en formato 2x100 g (natural con capa de frutas de frambuesa, de albaricoque y con un toque de azúcar). Previamente, había lanzado una gama de ocho referencias en formato 2x100 g, para "adaptarse al modelo de compra en supermercados, con menor valor facial". Igualmente, presentó 'Sojasun Natural Azucarado' (4x125 g), 'Sojasun' con frutas Mango y Melocotón en trozos (4x125 g) y flan de vainilla (producto 100% vegetal dirigido al target infantil).
La categoría de yogures "100% vegetal" está dominada claramente por Danone ('Savia') y MDD, que aglutinan prácticamente el 90% del mercado. La multinacional francesa puso en los lineales a principios de 2014 una variedad sin lactosa de su gama de lácteos reductores de colesterol, 'Danacol', con "sabor natural" y en packs de seis unidades a un precio recomendado de 4,13 €. Este nuevo producto tiene como objetivo responder a las necesidades de las personas intolerantes a la lactosa que buscan reducir sus niveles de colesterol (si bien no es apto para alérgicos a la proteína de la leche de vaca). El resto de la familia 'Danacol' está compuesta por Danacol natural, Danacol piña, Danacol fresa y Danacol tropical. Presente en el mercado español desde 2004, es una leche fermentada con esteroles vegetales que reduce el colesterol entre un 7% y un 10% en 2-3 semanas de consumo. Según ha reconocido la Comisión Europea el consumo diario de entre 1,5 y 2,4 g de esteroles vegetales permite reducir entre un 7 y un 10 por ciento los niveles de colesterol LDL en sangre en un plazo de tres semanas.
La categoría de yogures "100% vegetal" está dominada claramente por Danone ('Savia') y MDD, que aglutinan prácticamente el 90% del mercado. La multinacional francesa puso en los lineales a principios de 2014 una variedad sin lactosa de su gama de lácteos reductores de colesterol, 'Danacol', con "sabor natural" y en packs de seis unidades a un precio recomendado de 4,13 €. Este nuevo producto tiene como objetivo responder a las necesidades de las personas intolerantes a la lactosa que buscan reducir sus niveles de colesterol (si bien no es apto para alérgicos a la proteína de la leche de vaca). El resto de la familia 'Danacol' está compuesta por Danacol natural, Danacol piña, Danacol fresa y Danacol tropical. Presente en el mercado español desde 2004, es una leche fermentada con esteroles vegetales que reduce el colesterol entre un 7% y un 10% en 2-3 semanas de consumo. Según ha reconocido la Comisión Europea el consumo diario de entre 1,5 y 2,4 g de esteroles vegetales permite reducir entre un 7 y un 10 por ciento los niveles de colesterol LDL en sangre en un plazo de tres semanas.