El mercado de productos para las dos principales intolerancias alimentarias, al gluten y a la lactosa, continúa en pleno desarrollo y avanzando a pasos agigantados, bajo los esfuerzos comunes de administración, fabricantes y distribución. En lo que respecta a los organismos públicos, el pasado 13 de diciembre entraba en vigor el nuevo Reglamento para el etiquetado de alimentación y bebidas, en el que se obliga a destacar mediante tipo de letra, estilo o color la presencia de alérgenos o de ingredientes que causen posibles intolerancias. Es decir, el alérgeno deberá ir destacado respecto al resto de ingredientes y también será obligatorio comunicarlos en los alimentos sin envasar. Esta “pequeña” medida aliviará a los personas afectadas por estas intolerancias, que podrán hacer la compra de una manera más rápida, identificando los alimentos que pueden añadir “a su cesta”. El caballo de batalla para estos colectivos continuará siendo, no obstante, el precio, debido al incremento que suponen estos productos respecto a los de una dieta “común”.
En este sentido, los avances caminan más despacio, si bien la distribución alimentaria moderna prosigue la apertura de sus lineales a estos alimentos y bebidas, lo que en la práctica se traduce en muchos casos en un ahorro respecto a las tiendas especializadas. Una medida importante fue la adoptada por Eroski a mediados del pasado año, que incrementó en más de 200 referencias el surtido de productos sin gluten en sus hipermercados, supermercados y tienda online, completando una de las ofertas más completas del mercado con más de 600 artículos aptos para celíacos.
Este incremento ha supuesto no sólo una ampliación del surtido, sino también la incorporación de soluciones sin gluten en categorías de consumo diario, como harinas, panes rallados, pasta, bollería, panes de molde, galletas, congelados e incluso pizzas. Además, Eroski ha agrupado estos productos, para una compra más rápida y sencilla, mecánica que hasta ahora era muy lenta y que a la postre era una de las principales quejas por parte de los colectivos afectados. En esta misma línea de facilitar la compra a estas personas, Condis ha incluido tras la renovación de su supermercado virtual (condisLine.com) una sección de productos sin gluten.
En cuanto al hándicap del precio, los retailers están apostando por realizar campañas puntuales, además de introducir este tipo productos en su círculo de promociones. Carrefour, por ejemplo, puso en marcha el pasado mes de septiembre una campaña de productos básicos sin gluten a 1 €. En esta ocasión se trató de una iniciativa dirigida a los consumidores celíacos que ofrecía descuentos de hasta el 70% en productos sin gluten en todos los hipermercados que el grupo tiene en España. La promoción incluía más de 35 productos básicos, entre los que se encontraban panes, pastas de varios tipos, postres, chocolates, cereales, galletas o aperitivos. Carrefour ofrece en sus establecimientos un total de 500 productos sin gluten, cifra que se ha visto multiplicada por cuatro desde 2012.