Nestlé España mantiene su peso dentro del grupo. Con unas ventas de 3.039 M CHF, equivalentes al 2,8% de la facturación consolidada de la compañía, se coloca como la octava filial por tamaño y la que mejor comportamiento mostró dentro de las grandes economías de la zona euro. También en cuanto a presencia fabril, con trece factorías, superada sólo por otros seis países y empatada en número de plantas con México, Australia y Gran Bretaña. Pero la filial española merece una tercera mención dentro de la memoria del ejercicio 2008 publicada por la compañía: su fábrica de La Penilla (Cantabria) fue elegida para hacer una prueba piloto con el programa NEC ('Nestlé Continuous Excellence') pensado para mejorar la eficiencia operativa. El programa funcionó en torno al concepto de "Lean Thinking" (pensamiento magro, sin grasa) y consiguió reducir a la mitad de tiempo el proceso por el que un haba de cacao se convierte en una onza de chocolate, de 60 días a un mes. Para ello hubo de repensar cada paso de la cadena de suministro, desde la simplificación de recetas a la reducción de stocks, del número de tintas usado en el packaging y de los tiempos de producción y concluyendo con una mejora de la logística. En el negocio de chocolate la distribución capilar y conseguir una excelente visibilidad dentro de la tienda son decisivos para aumentar las ventas, ya que el 70% de las ventas se producen por impulso.