La galletera Cerealto Siro ha confirmado su intención de cerrar su planta de Venta de Baños 1, especializada en la producción de galletas dulces (principalmente, de desayuno y otras básicas) y saladas, cuya producción se trasladará principalmente (70%) al resto de centros que la compañía tiene en Castilla y León (en la propia localidad de Venta de Baños, Aguilar de Campoo y Toro, principalmente); el resto irá a parar a las plantas que el grupo tiene en el exterior (Reino Unido, Portugal, Italia y México).

El traslado del volumen se producirá de forma paulatina a lo largo de los próximos 24 meses y conllevará la salida de sus 197 trabajadores, que serán recolocados en otras plantas de la compañía (50 personas en Venta de Baños y el resto entre Aguilar de Campoo y Toro), o bien, que saldrán con las condiciones acordadas con el Comité de Empresa y la Compañía, circunstancias ambas que no convencen a los sindicatos, que apuntan a una intención por parte de la compañía de dificultar el traslado de la plantilla de la fábrica, empeorando sus condiciones laborales actuales, para forzar así la solicitud de baja voluntaria.

Entre los motivos esgrimidos por la compañía para su clausura del centro de Venta de Baños se encuentra “la falta de competitividad” de la planta, con un coste salarial un 29% superior a la media del resto de plantas de la compañía en España y un nivel de absentismo del 18,2%, porcentaje que desde los sindicatos bajan al 9%, mientras que respecto a la competitividad, estas mismas fuentes apuntan a que en los últimos meses se había reducido el volumen de actividad de la planta, con el traslado de algunas referencias como las galletas para helados a otras plantas, en este caso, a Portugal.

Este anuncio se enmarca en las medidas adoptadas por la compañía dentro del bautizado como Plan de Mejora de la Competitividad, con el que Cerealto buscaba reducir sus costes estructurales antes de la entrada de un socio inversor. Entre el resto de cuestiones incluidas en este programa se encontraba también una importante reducción en los costes laborales, lo que está provocando conflictos en algunas de las plantas que el grupo opera en Castilla y León, contrarias a la aplicación de estas medidas.

Precisamente, el anuncio del cierre de Venta de Baños ha coincido con la votación realizada en el centro de Toro (Zamora) sobre la aceptación o el rechazo de la plantilla a estas medidas, tras el visto bueno de los trabajadores de las fábricas de Aguilar de Campoo (Palencia) y del comité de empresa del Centro Especial de Empleo, posteriormente no ratificado por los trabajadores. Esta votación se produce el día que concluye el plazo dado por la compañía a sus trabajadores para manifestarse sobre el Plan de Competitividad.

De la aprobación de este plan depende, según la compañía, la entrada definitiva en el capital de los fondos DK y Afendis, que proporcionarían una inyección financiera estimada en 180 M€, a cambio del 75% de los títulos de la compañía, y que le permitirían de esta forma continuar con su actividad, en riesgo de fallido, tras haber acumulado una deuda en los últimos años de hasta 300 M€. Por el momento, ambas sociedades han comenzado con los trámites para poder formalizar la operación, solicitando autorización a la CNMC.