La Flor Burgalesa continúa dibujando una línea ascendente en su volumen de negocio y cerró el ejercicio 2013 con una facturación de 12,1 M€, un 8% por encima de las ventas alcanzadas un año antes (11,2 M€) y un 44% más que en 2011, curso cerrado con unos ingresos de 8,4 M€. Con vistas a este 2014, las previsiones que maneja la compañía pasan por alcanzar una cifra de negocio de 13,6 M€ (+12,4%), con una producción de 6.800 t, frente a las 6.500 t del ejercicio anterior.
El exponencial crecimiento que ha venido registrando La Flor Burgalesa en los últimos ejercicios es en parte fruto de la importante apuesta por la internacionalización realizada en 2012 y que se vio reforzada en 2013 con la firma de un acuerdo con la cadena Dia para la producción de barquillos de nata y chocolate para sus establecimientos de Francia y Portugal. Además, el pasado verano cerró una alianza con los responsables de la gestión de la imagen de los dibujos animados Momoking en China para la producción de galletas licenciadas con estos personajes tan conocidos en el país asiático, lo que supuso en la práctica, el desembarco de la Flor Burgalesa en este continente. Actualmente, La Flor Burgalesa tiene presencia en Italia, Japón y Argelia, además de en China, Francia y Portugal. En total, s us ventas al exterior supusieron durante el pasado ejercicio un 16% del total, frente al 6% del ejercicio anterior, y confía en que el porcentaje crezca hasta el 20% al término de 2014.
Dentro de nuestras fronteras, continúa ganando peso en la compañía la MDD, que supone alrededor del 26% de su negocio, con acuerdos con cadenas como Dia, Carrefour, Alcampo, Spar, Covirán, Gadisa, El Árbol o Semark ('Lupa'), para las que elabora tanto barquillos como galletas especialidades y de desayuno. El resto de su producción se comercializa bajo sus enseñas propias ('Florbu', 'Covy' y 'Dibari').
Para responder a la creciente demanda registrada tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, la inversión en inmovilizado se ha convertido en una constante para la firma, que desembolsa anualmente una importante suma para modernizar y automatizar sus instalaciones y equipos. Para este ejercicio ha presupuestado una inversión de 1,5 M€, que serán destinados a la renovación de uno de sus hornos. Esta cifra se suma los 600.000 € que empleó durante 2013 en incorporar nuevos activos para el empaquetado y final de línea.
La innovación también prevé convertirse en una de las señas de identidad de la compañía, de ahí que durante el pasado 2013 haya acometido una completa renovación de su catálogo, al que se incorporaron hasta una decena de referencias, si bien, su principal especialidad continúan siendo los barquillos rellenos. Muchas novedades se tradujeron en nuevos formatos para su comercialización tanto en el mercado nacional como en el exterior y a través del canal impulso, en el que hasta ahora no tenía presencia. Precisamente, para explorar las posibilidades de este canal, especialmente en el exterior, ha desarrollado las versiones de 93 g de las galletas cookies choco y cookilate, así como el formato de 120 g de las galletas circus, para el público infantil. Precisamente, tanto las cookilate -cookies de cacao y chips de chocolate- como las galletas circus -mini cookies para el público infantil para el mercado internacional- son dos de los nuevos desarrollos presentados por La Flor Burgalesa y están también disponibles en 185 g y 225 g, respectivamente. El apartado de novedades se completa con nuevos los formatos de 120 g y 135 g de los barquillos tradicionales; las cookies choco de 185 g; las galletas castellana en formato de 160 g y 500 g, y un nuevo surtido de galletas integrales. Además, presentó nuevas referencias, además de las ya mencionadas, como los wafer sabor nocciola (en 280 g, 135 g y 120 g), las galletas rústica -con miel- (185 g) y las galletas marina -para el desayuno- (180 g).
Con vistas a este 2014, continuará en esta línea y desarrollará nuevas galletas infantiles, referencias para el desayuno con mil y otras con chocolate, además de sumar más formatos para el canal impulso.
La buena marcha de La Flor Burgalesa no ha pasado desapercibida en su localidad de origen, donde la Confederación de Asociaciones Empresariales de Burgos (FAE) acordó recientemente otorgar a la compañía su máximo galardón, por tratarse de una empresa familiar, de tradición y que lleva el nombre de Burgos por todo el mundo.