Parecía claro que la entrada del líder de la categoría de postres lácteos frescos, el grupo murciano Reina, en productos de origen vegetal era cuestión de tiempo, con sus grandes competidores ya presentes en este nuevo segmento (Danone con 'Alpro', Dhul con 'Me Up!' o Kaiku con 'Begetal', entre muchos otros). Y su apuesta no se ha hecho esperar. Así, la compañía acaba de lanzar su nuevo distintivo 'Reina Vegetal', con el que está trabajando para lanzar una gama de varios productos. De momento, el primero es un arroz con horchata de chufa, elaborado con horchata D.O. Chufa de Valencia, arroz y canela, que se convierte en la alternativa vegetal de Reina al clásico arroz con leche. Esta referencia se elabora en su planta central, ubicada en su sede de Caravaca de la Cruz (Murcia). Se comercializa en pack de 4x125 g, con un pvp aconsejado de 1,85 €. Cuenta con el sello de certificado vegano, naturalmente sin lactosa y sin proteína láctea. El grupo trabaja en nuevos desarrollos, con la idea de conformar un catálogo bajo la marca 'Reina Vegetal' antes de que finalice el presente año.
Reina inicia así la diversificación hacia un nuevo nicho de mercado, el de las alternativas vegetales a los yogures y postres lácteos, en plena expansión. De hecho, el grupo ha acelerado sus planes, que inicialmente contemplaban entrar en esta categoría en 2020. El grupo Reina comercializó desde sus tres plantas de la Península (Caravaca, Málaga y la localidad portuguesa de Pombal) algo más de 77.100 t de postres lácteos el pasado año, de las cuales unas 69.000 t se colocaron directamente en España. Así, Reina prácticamente dobla a sus más inmediatos perseguidores en la categoría de postres, que son Schreiber Foods España, proveedor de Mercadona, con unas 36.000 t según estimaciones de Alimarket; Danone, con cerca de 35.000 t, y Postres Lácteos Romar, también suministrador de Mercadona, que cerró 2018 con 33.250 t y cuya previsión para 2019 apuntaba a las 36.000 t. El impulso de la categoría emergente de alternativas vegetales es importante para todos estos operadores, que están viendo como el sector de postres lácteos se está mostrando perezoso en los dos últimos años, perdiendo fuelle frente al de los yogures, que han sabido posicionarse hacia el vector placer. La división de postres de Reina creció un 2% en 2018, hasta los 132,6 M€.
Precisamente, Reina acaba de efectuar un movimiento estratégico en yogures, categoría en la que entró a competir en 2015. Hasta ahora, todos sus yogures eran de textura cremosa, ya fueran los propios cremosos, bífidus, bicompartimentados, bicapas, tricapas, griegos o los de formato grande para compartir. Sin embargo, está ultimando el lanzamiento de una gama de yogures firmes, textura similar a la de los yogures tradicionales o básicos de sabores. El lanzamiento se producirá en los próximos días, en packs de 4 y 8 unidades y con una amplia gama de sabores (vainilla, limón, plátano, macedonia, fresa-plátano, galleta, coco, natural, etc). La producción de estos yogures firmes ya se ha iniciado en Caravaca de la Cruz y sustituye a la línea que tenía para cremosos de sabores en estas instalaciones (macedonia, fresa y natural azucarado). El lanzamiento de estos yogures básicos es importante, ya que podría significar probablemente la entrada de Reina en la producción de yogures para MDD. Hasta ahora todos los yogures de la compañía se comercializan con su enseña 'Reina'. De ser así, supondría la entrada de un nuevo operador en el difícil mercado de los yogures básicos de sabores con marcas de distribuidor, en el que existe una competencia brutal y unos márgenes muy estrechos. Lactalis Nestlé, Schreiber y el grupo francés Andros son los principales actores en este segmento. Hasta ahora la estrategia de Reina en yogures había sido marquista, con un catálogo de productos diferenciador, si bien estos yogures firmes podrían otorgarle unos volúmenes mayores. Reina comercializó el pasado año unas 2.500 t de yogures, casi un 40% más que el ejercicio precedente, equivalentes a unos 3,5 M€.