La Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha impuesto multas por valor de 4,8 M€ a cuatro fabricantes de ascensores por obstaculizar la actividad de los competidores en el mercado de mantenimiento de aparatos elevadores a través del empleo de medios desleales. Las cuatro firmas fabricantes habrían enviado cartas a sus clientes que "contienen manifestaciones que son aptas para desacreditar, menospreciar o denigrar a los competidores en el mercado del mantenimiento y reparación de ascensores". El organismo regulador entiende que la intención de estas misivas es la de descalificar y denigrar a los competidores no integrados verticalmente , apelando a los riesgos inherentes en la contratación de sus servicios de mantenimiento haciendo referencia a la supuesta falta de medios y formación adecuada. Esta actitud entorpece "la consolidación de las pequeñas empresas dedicadas al mantenimiento y reparación de ascensores fabricados e instalados por otros operadores".
Las cuatro firmas sancionadas son Zardoya Otis (2,84 M€), Schindler (1,89 M€), Eninter (103.533 €) e Imem (25.732 €), mientras que Inelsa ha quedado exenta de sanción al no acreditarse infracción. La actuación de la CNC se inició tras una denuncia de una comunidad de propietarios y de la instaladora gerundense Citylift con motivo de estas misivas. Para la CNC, las empresas fabricantes e instaladoras de ascensores son operadores verticalmente integrados que parten con una ventaja competitiva en el mercado conexo de mantenimiento y reparación de ascensores . Esta estructura de mercado, caracterizada por operadores más fuertes con redes en el mercado minorista genera barreras a la entrada en el mercado de instalación y mantenimiento, barreras que se han visto reforzadas por las conductas individuales sancionadas.